La ampliación de la carretera entre San José y San Ramón quedaría en manos de funcionarios del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) y del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi).
Así ocurriría una vez que el Gobierno complete el período de transición para cerrar el fideicomiso con el Banco de Costa Rica (BCR), el cual tenía a su cargo la gestión.
Ese es uno de los pocos aspectos que parece tener claro el Conavi con respecto a la decisión de poner fin al fideicomiso y buscar otro mecanismo para concretar la ampliación de los 55 kilómetros entre La Sabana y el centro de San Ramón.
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Ante consultas de La Nación, el gerente de la unidad ejecutora del proyecto, Efraín Zeledón, afirmó que al eliminar el fideicomiso y con la participación de personal de planta del MOPT y Conavi se reducirían los gastos de operación, estimados en $50 millones a lo largo de 30 años. Ese, dijo, era el monto que se proyectaba pagar por los servicios contratados al BCR durante la construcción y operación de la vía.
Sostuvo que al migrar de la figura del fideicomiso a un préstamo se eliminan los costos de fiducia.
En relación con los estudios en los que se sustentaron para determinar que el costo de estructurar un nuevo proyecto resultaría menor al de continuar con el plan actual, Zeledón afirmó que se hizo un “análisis” de la programación del proyecto y se determinó que “existía una tendencia al alza en temas de plazos y costos”.
No obstante, según lo indicado por la unidad ejecutora, en el Conavi no hay claridad aún sobre los cambios que se harían en el proyecto para bajar el costo.
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Sobre las modificaciones en los alcances del proyecto que días atrás citó el ministro Luis Amador, el gerente de la unidad ejecutora explicó que la intención es hacer un proyecto que sea viable desde el punto de vista financiero, técnico y social, aunque no describió cómo conseguirlo.
“Lograr conjugar estos tres elementos requiere de muchos análisis, pero no necesariamente significa que se deba reducir el alcance del proyecto ni su calidad”, indicó en la respuesta enviada por correo electrónico.
Se prevé que el período de transición para completar el cierre del contrato con el BCR finalice en diciembre del 2024, momento a partir del cual el MOPT comenzaría con la estructuración del proyecto integral. Según el Conavi, esa modificación no generaría más atrasos de los que ya se han presentado, pues aseguran que el proyecto ya debería llevar un avance del 50% y lo que se ha ejecutado es inferior a lo proyectado.
Adenda rechazada
El gerente de la unidad ejecutora confirmó, además, que la adenda que en el pasado el ministro dijo haber enviado al Banco de Costa Rica, fue desestimada porque no atendía las necesidades del proyecto “de la mejor manera”.
El funcionario aseguró que la nueva propuesta, que también debe ser aprobada por el BCR, incluiría aspectos de plazo, costo, funciones y alcances de los servicios que la entidad financiera seguiría dando.
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La intención del Conavi es que se ajuste en al menos un 50% el monto mensual de facturación del Fideicomiso Ruta Uno.
El pasado 11 de enero, el ministro Amador aseguró que ya habían tenido acercamientos con funcionarios del banco y que en su mayoría están de acuerdo con las modificaciones.