– Usted tiene nueve meses al mando del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) ¿Qué impresión tiene de la institución pasado este tiempo?
– El MOPT sí es una institución muy compleja en el sentido que tiene muchas materias a su cargo: puertos, aeropuertos, transporte público, infraestructura y seguridad vial. La cantidad de temas que son responsabilidad de este ministerio es muy grande, eso es algo que han señalado diversos exministros del MOPT.
– ¿Qué cambios haría si pudiera para hacer más ejecutiva la labor del ministro?
– Una cosa que se ha mencionado es que el ministro tiene una responsabilidad grande, porque al final de cuentas tiene que darle cara a la opinión pública y explicar por qué las cosas se hacen o no se hacen, pero el poder de decisión es muy limitado por la existencia de juntas directivas (en el Consejo Nacional de Vialidad, Consejo Nacional de Concesiones, Consejo Técnico de Aviación Civil, Consejo de Transporte Público y Consejo de Seguridad Vial).
"Desde mi punto de vista, por más objetivos, por más transparentes y por más que quieran hacer bien las cosas las juntas directivas, la responsabilidad, al final de cuentas, siempre recae en los representantes de la Administración.
"Creo que debe haber una simplificación de esas instituciones, en el sentido de que más que juntas directivas deberían tener un presidente ejecutivo y una sola junta directiva general en la que no solo esté el ministro del MOPT, incluir al ministro de Hacienda y al de Planificación, eso haría probablemente más eficiente la toma de decisiones".
– ¿Cuál ha sido el mayor aporte de este gobierno en materia de infraestructura?
– Hay dos cosas muy importantes. Por un lado se hizo ajustes a la legislación que rige el funcionamiento del MOPT y el Conavi para tramitar expropiaciones de manera más rápida (...) Por otra, se hizo la modificación legal para usar dinero de conservación vial para obras menores nuevas.
"Por ejemplo, los cambios viales en la intersección del aeropuerto (Juan Santamaría), esa es una cosa que ha estado ahí por años, tenía una solución viable y la ejecución de ese tipo de soluciones era muy compleja, requerían de un desgaste administrativo muy grande y nadie se interesaba en la contratación porque a una constructora, muchas veces, no le parecía rentable movilizar maquinaria y personal para una obra pequeña".
– ¿Qué proyectos viales dejan listos para iniciar la fase de construcción?
– Todavía estamos con la Contraloría General de la República resolviendo el puente sobre el río Virilla en la ruta 32 y el paso a desnivel en Garantías Sociales, esperamos que en las próximas semanas eso se resuelva, pero eso queda casi listo para ejecutar.
"Playa Naranjo-Paquera es un proyecto en el que ya se hizo todo el diseño, todo el proceso de contrato, ya está adjudicado y en estas últimas semanas se firmó el contrato y esperamos que en los próximos días se dé la orden de inicio, esa obra la ejecutaría la próxima Administración.
"De igual forma, los tramos de Cañas-Barranca ya están diseñados, están en proceso de contratación, están casi listos. El puente que se está construyendo en la ruta 147 (Lindora), esa obra la va a recibir la próxima Administración muy avanzada y se estaría terminando a finales de este año.
"Además, evidentemente la ruta 32, esperamos que la corta de árboles avance y que en las próximas semanas termine de llegar equipo de China, esa obra la ejecutará y la finalizará la próxima Administración".
¿Cuál es el proyecto vial que más se le enredó al gobierno de Solís? ¿Es la ruta San José-San Ramón?
-(Guarda silencio por varios segundos) "San José-San Ramón tiene una complejidad, las intenciones del Banco de Costa Rica de ejecutar ese proyecto con mayor agilidad eran buenas y toda la solicitud de adenda (del contrato original de fideicomiso), pero el análisis para obtener una adenda sustentable y viable tomó mucho tiempo, creo que viendo los resultados de esa adenda hubiese sido preferible que el proyecto hubiese comenzado bajo los criterios del contrato original.
"La obra más complicada y que así la recibió esta Administración es Sifón-La Abundancia, esa carretera ha tenido vaivenes a lo largo de muchísimos años, cambios que se han ido suscitando a lo largo de esos años: el cambio en la contratación, el cambio del contratista, el cambio en el diseño del proyecto, con una complejidad geotécnica y de estudios básicos que no se tuvieron en su momento y que la Administración ha tenido que ir resolviendo a brincos y a saltos. Ese es el proyecto más complejo. Hoy por hoy, se requiere resolver el financiamiento que hace falta".
–¿Por qué fracasó la idea de cerrar el Conavi y crear el Instituto Nacional de Infraestructura Vial?
– Yo no diría que fracasó porque el proyecto de ley está presentado.
– Pero la realidad es que el proyecto no va a ser aprobado por los diputados en lo que queda de este gobierno...
– Lo que pasa es que hay que entender que cerrar una institución tan importante como el Conavi o reformarla no es algo sencillo, en primer lugar había que tener la alternativa, es decir, yo no puedo cerrar una entidad y no saber quién se hace cargo de las obras en proceso y de la conservación vial, eso no se puede dejar al aire.
"Se necesita saber quién se va a encargar de eso y con eso me refiero a tener diseñada una institución o una nueva forma de trabajar y eso tomó mucho tiempo, creo que ese es un aporte de esta Administración.
"Dejamos pensada una institución distinta con unas reglas de operación diferentes que son muy necesarias, el Conavi no fracasa porque en sí no funcionen, es que las reglas de funcionamiento de esa entidad son muy complicadas y entraban todo".
– El presidente electo, Carlos Alvarado habló en su discurso de victoria sobre ampliar la ruta 27 (San José-Caldera) y tomar decisiones para la ampliación de esa carretera ¿Por qué no se decidió nada sobre la ampliación en los últimos cuatro años a pesar de que existe una propuesta del concesionario para ampliar?
– Cuando yo llegué al Consejo Nacional de Concesiones, a finales del año pasado, me di cuenta de que no existía una propuesta, es decir, había una propuesta muy preliminar, pero que no cumplía con todos los requisitos de una propuesta técnica completa con análisis financiero, eso no existía. Lo que existía era una propuesta conceptual.
Hasta que no exista una propuesta formal no se puede valorar nada y tampoco tomar una decisión sobre la ampliación de la carretera. Ya le pedimos al concesionario que presente esa propuesta.
– ¿Cuándo esperan tomar una decisión sobre la ampliación de esa carretera?
– Esperamos hacer una revisión de los documentos y que en el transcurso del mes de abril eso se lleve a Concesiones.
– ¿Cuáles deben ser las prioridades del próximo ministro del MOPT?
– Hay dos temas fundamentales y delicados, el primero tiene que ver con los contratos de conservación de las rutas de lastre, porque no ha sido posible adjudicar esos contratos, ha sido muy engorroso y los carteles han sido apelados, se vuelven a publicar y vuelven las apelaciones y no ha sido posible adjudicarlos, se tiene que adjudicar como se adjudicó el mantenimiento de las rutas pavimentadas.
"(...) La red vial nacional de lastre está muy mal, imagínese que hemos tenido que acudir, en algunos casos, a maquinaria del MOPT, a ir a medio arreglar la ruta para que sean transitables, pero el recurso del MOPT es muy escaso.
"El otro es que los puentes de la red vial nacional han tenido un mantenimiento muy básico, pero hay muchas estructuras que requieren una intervención urgente, el gran reto es que, probablemente, el presupuesto que se necesita es equivalente al presupuesto total del Conavi para conservación vial (¢363.000 millones para el 2018).
"El otro tema es transporte público, darle seguimiento a la sectorización de rutas de bus y darle seguimiento a la modernización del transporte público".
– ¿Seguiría en el puesto de ministro si el nuevo presidente se lo pide?
– (Risas) Sabía que me iba a preguntar eso, en este momento prefiero no pensar en eso, estoy tratando de cerrar proyecto y si me lo ofrecieran me tomaría el tiempo para analizarlo