La construcción del tramo norte de la carretera de Circunvalación que está a punto de iniciarse, quedará inconclusa.
El Estado carece de fondos para levantar un trayecto de 1,3 kilómetros que va del precario Triángulo de Solidaridad al centro de Calle Blancos, ambos en el cantón de Goicoechea.
Esta sección forma parte de los 5,6 km de la nueva vía. Sin embargo, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) solo dispone de $147 millones para construir 4,3 kilómetros.
Carlos Villalta, ministro de Obras Públicas y Transportes, afirmó que, mientras se avanza con el trecho financiado, buscarán el dinero restante para ampliarle el contrato al consorcio Estrella-H. Solís, constructora a cargo del proyecto total.
El plan del MOPT es comenzar la obra en dos meses y durante los 18 meses de construcción hallar el presupuesto para los 1,3 km restantes.
Villalta informó de que necesitarían $70 millones, aproximadamente, ya que es una zona de alta densidad urbana que requeriría un presupuesto abultado para un número aún no determinado de expropiaciones.
Además, se pretende construir un paso elevado que aumentaría más el costo.
Una de las posibilidades es instalar un peaje para conseguir esos recursos, estimó Villalta.
Circunvalación norte es una obra pendiente desde 1975, año en que se concibió la carretera actual. El proyecto es necesario para completar la principal vía de distribución de tráfico de la Gran Área Metropolitana (GAM).
Por este corredor transitan más de 60.000 vehículos por día.
La obra. Los 4,3 km que sí están financiados van de La Uruca al precario Triángulo de Solidaridad. Esa obra costará, $147 millones.
Del trayecto, 2,5 km serán un viaducto a desnivel para no interrumpir el tráfico con múltiples intersecciones a nivel.
El monto del contrato contempla el diseño, estudios previos y construcción. La etapa de diseño se inició desde agosto de 2014.
Esta fase ha sufrido cinco suspensiones por diferentes razones, en especial por atrasos con las 99 expropiaciones y la reubicación de familias del precario Triángulo de Solidaridad.
Más de 300 familias deben salir de este asentamiento para la construcción de la carretera, de las cuales 63 ya fueron instaladas en otras comunidades.
Este grupo era prioritario, pues los residentes estaban dentro de una franja en la cual se debían hacerse estudios de suelo importantes para los diseños.
En segundo plano se encuentran otras 33 familias, las cuales serán reinstaladas en setiembre. El resto serán removidas en diferentes momentos.
El financiamiento del proyecto proviene del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
La Cámara Costarricense de la Construcción (CCC) y el Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (CFIA) coinciden en que la obra urge, pese a que un tramo quede inconcluso.
“Tratamos de ser optimistas y entender el proyecto planteado como una etapa dentro de una gran obra que requiere la culminación pronta de los otros tramos”, dijo Jorge Arturo González, presidente de la CCC.
Olman Vargas, director ejecutivo del CFIA, expresó que construir esta carretera es una “ imperiosa necesidad”.