En medio del pulso que libran sectores limonenses por el uso y la repartición del canon del megapuerto, el Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap) propone financiar la construcción del nuevo hospital Tony Facio, con parte de los recursos que transfiere la Terminal de Contenedores de Moín (TCM) para el desarrollo de la provincia.
Los sindicalistas enviaron un oficio al presidente del Congreso, Eduardo Cruickshank, para que considere presentar un proyecto de ley con el propósito de financiar el centro médico.
En su misiva, Sintrajap denuncia hacinamiento de pacientes en el centro médico limonense y falta de personal médico para satisfacer la demanda de servicios de salud de la población.
El Sindicato es uno de los sectores sociales que respalda el plan del diputado limonense del Partido Restauración Nacional (PRN), para la construcción del Gran Parque de Diversiones del Caribe, también con financiamiento del canon.
No obstante, ese proyecto encara múltiples objeciones, entre estas las de los seis alcaldes limonenses que encararon a Cruickshank porque, según ellos, presentar proyectos de ley para financiar propuestas particulares dejaría sin recursos disponibles a las municipalidades.
También reclamaron una distribución justa de los dineros entre los cantones de la provincia.
Asimismo, señalaron que todos los proyectos deberían ser postulados ante la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), la que gestiona los recursos para su respectiva evaluación con un método acordado con los gobiernos locales.
En una sesión extraordinaria que sostuvieron con el presidente del Congreso, el pasado jueves, los jefes municipales también hicieron énfasis en que los recursos del canon no debían financiar obras que sustituyan obligaciones que ya el Estado tiene con la provincia, como obras de infraestructura de salud, educación o transporte.
El nuevo hospital Tony Facio está entre los planes de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), que debido al impacto económico de la pandemia, quedaron a la espera de financiamiento.
Por el momento, la entidad solo autorizó la compra del terreno donde se ubicaría el nuevo centro médico, cuya inversión asciende a ¢6.000 millones, según proyecciones financieras de la Caja. La licitación para la construcción del inmueble quedó congelada.
En el cronograma de la CCSS, el comienzo de ese hospital, lo mismo que el de Cartago, está previsto para el 2023.
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Sin concretar
El canon que paga el megapuerto corresponde al 7,5% de los ingresos netos mensuales de APM Terminals, empresa concesionaria.
Actualmente, Japdeva guarda en sus cuentas $26,8 millones, es decir, unos ¢16.400 millones, que se han acumulado desde la entrada en operación de la terminal portuaria, en octubre de 2018.
En un plazo de 30 años, Japdeva dispondrá de $1.000 millones dirigidos a proyectos de desarrollo socioeconómico en toda la provincia.
Pese a que desde que se firmó el contrato de concesión, en 2011, se sabía la disponibilidad de esos recursos, la empresa estatal nunca elaboró un portafolio de inversiones.
Fue hasta el año 2018 cuando se integró una mesa multisectorial para empezar a proponer las obras.