La rehabilitación de la pista del aeropuerto Daniel Oduber Quirós, en Liberia, Guanacaste, cuyo cuestionado contrato le costó el puesto al ahora exministro Luis Amador Jiménez, está paralizada desde junio y recientemente recibió una orden de suspensión de tres meses.
Esto es un recuento de lo que ha ocurrido con esa obra y las razones de la suspensión.
La rehabilitación de la pista del aeropuerto de Liberia era catalogada como urgente, debido a que el mal estado ponía en riesgo la operación de aeronaves de gran tamaño. Incluso la holandesa KLM suspendió los vuelos a Guanacaste desde mayo del año pasado. Informes del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (Lanamme) advertían de esta situación desde el 2017.
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El 21 de junio del 2023, casi un año después de la tormenta tropical Bonnie, Rodrigo Chaves Robles, presidente de la República, y Natalia Díaz Quintana, entonces ministra de la Presidencia, firmaron un decreto ejecutivo que permitió contratar la rehabilitación de la pista de aterrizaje a través de un mecanismo de emergencia sin aplicar las reglas ordinarias de contratación administrativa. Se hizo así con el argumento de que la tormenta causó daños en la pista.
El contrato fue adjudicado a la constructora MECO en enero de este año, por un monto de ¢21.800 millones a pesar de que su oferta no era la más barata. Los trabajos recibieron orden de inicio el 8 de marzo.
El 12 de marzo, Chaves destituyó a Luis Amador, entonces ministro de Obras Públicas y Transportes, alegando que esa contratación se hizo como un “traje a la medida” de MECO y que el país deberá pagar un sobreprecio de $2 millones (¢1.000 millones, aproximadamente) por haber elegido a esa constructora y no a Grupo Pedregal, que ofertó por menos dinero.También se separó del cargo a Fernando Naranjo quien fungía como director de Aviación Civil.
Los diputados de la Comisión de Infraestructura iniciaron una investigación sobre las supuestas irregularidades en el contrato. Los principales hallazgos tras una serie de audiencias en las que participaron ingenieros de Aviación Civil, la jefa de aeropuertos, expertos del Lanamme y otros funcionarios, se centran en que los daños en la pista no fueron ocasionados ni acelerados por la tormenta tropical Bonnie, por lo que su inclusión en el decreto de emergencia no se justificaba.
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En el mes de junio, la empresa MECO informó a la unidad ejecutora del proyecto de que no podía cumplir con los parámetros del asfalto establecido en los términos de referencia de dicho contrato, debido a las características o tipo de mezcla asfáltica que le proporciona Recope. En ese mismo mes, las obras se suspendieron debido a la situación planteada por la firma y por las condiciones climáticas.
Adicionalmente la empresa informó de que conforme avanzan los trabajos, descubrieron que estaban cambiando “material bueno, por material bueno”, es decir que el material en las capas inferiores de la pista que debían sustituir está en buen estado. Para corregir esta situación la constructora presentó una “ingeniería de valor” que según el MOPT representaría un ahorro de $5 millones.
Mientras tanto, las obras en la pista seguían detenidas y, según la constructora, se avanzaba en labores pluviales.
La unidad ejecutora conformada por ingenieros de Aviación Civil rehusó revisar la propuesta de MECO, alegando, según el ministro del MOPT, Mauricio Batalla, que existía conflicto de intereses. Por esa razón Aviación Civil contrató un experto internacional que se encargó de revisar la propuesta y de realizar nuevas pruebas en campo y laboratorio.
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Batalla aseguró el pasado 7 de octubre ante los diputados de Guanacaste, que el consultor recomendó realizar un nuevo diseño, es decir no se avaló ni el plan original, ni la mejora planteada por MECO. Ese nuevo diseño implica una modificación en el contrato, además se debe conformar una nueva unidad ejecutora .
La Comisión Nacional de Emergencias y Aviación Civil acordaron suspender el contrato por tres meses a partir del 5 de octubre, para realizar esa modificación y debido a que, según la unidad ejecutora, se pronostican lluvias en esa zona para el último trimestre del año.
De acuerdo con el informe incluido en el expediente del Sistema Integrado de Compras Públicas (Sicop), al 30 de setiembre el proyecto presentaba un avance general del 37%. Las obras pluviales tenían un 62% de avance, mientras que la rehabilitación de la pista se encontraba en un 15%.