Para Efraím Zeledón, viceministro de Infraestructura, Costa Rica requiere de un cambio cultural para atacar el rezago en infraestructura pública que arrastra desde hace décadas. En sus palabras, no solo se trata de construir más carreteras, sino también de enlazar de una forma más eficiente los servicios de transporte público y el desarrollo urbano.
Zeledón sostiene que este esfuerzo exige el concurso de todos, empezando por una mejor planificación entre Gobierno Central y las municipalidades, y pasando por un cambio de mentalidad del propio ciudadano para que explore nuevas opciones para movilizarse.
“Todos queremos electromovilidad, pero de qué nos sirven 200 carros eléctricos en una presa. No contaminamos, pero es la misma presa”, aseveró.
El funcionario atendió a La Nación, el pasado jueves, luego de participar en Leipzig, Alemania, en la Cumbre de Ministros de Transporte del Foro Internacional de Transporte (ITF, por sus siglas en inglés), organismo al que Costa Rica se adhirió en busca de apoyo para reducir la brecha en infraestructura.
Zeledón espera que la incorporación al ITF, un ente asociado a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) permita obtener apoyo internacional en gestiones relacionadas con financiamiento, energía, transporte eléctrico, movilidad y seguridad vial. A continuación, un extracto de la entrevista:
- ¿Por qué Costa Rica decide adherirse al Foro Internacional de Transporte?
- Hace como seis meses, Costa Rica era el único miembro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que estaba por fuera de la ITF (por sus siglas en inglés), que está bajo la sombrilla de OCDE, con autonomía, pero asociada. Había una necesidad de involucrarse.
- ¿Cuál es la expectativa del MOPT con esta integración?
- Al ser un foro tan importante, tenemos la expectativa de conseguir apoyo internacional en las gestiones que tiene Costa Rica en temas de financiamiento, energía, transporte eléctrico, movilidad, seguridad vial y resiliencia contra el cambio climático. También buscamos transferencia de conocimientos de países socios que van más adelante con esto.
“El rezago y la brecha en infraestructura, transporte, electromovilidad, son muy grandes. Con esto estamos queriendo optimizar y disminuir esa brecha; pero no podemos hacerlo solos. Por eso este foro es importante”.
- ¿Obedece ese rezago a la falta de recursos?
- No necesariamente. Nosotros tenemos un gran apoyo de parte del BID (Banco Interamericano de Desarrollo), del BCIE (Banco Centroamericano de Integración Económica), y del Banco Mundial, pero es un tema de estrechez financiera; fiscalmente estamos muy oprimidos. Lo que se tiene que hacer es optimizar.
“El rezago en infraestructura trasciende partidos políticos, viene de 40 años para acá y siempre hemos tenido apoyo de organismos internacionales, sin embargo es un tema que tenemos que luchar por cambiar. Siento que ya es parte de la realidad nacional el ver que los proyectos no terminan; es algo que tenemos que ver cómo cambiamos”.
- ¿A qué atribuye las debilidades en la gestión de grandes proyectos como el tren eléctrico?
- Falta de planificación adecuada, tal vez la necesidad de ejecutar proyectos de forma inmediata. Obtenemos el financiamiento y tenemos que correr para ejecutar el proyecto, pero tal vez la etapa de preingeniería no se realiza con el cuidado que se debería tener y los problemas vienen en la etapa de ejecución.
- Hablar de transporte también es hablar de infraestructura y ahí hay desafíos
- Todo va de la mano, tenemos presas, rutas de buses obsoletas.
- Y vías constantemente interrumpidas
- Aparte del cambio climático y sus consecuencias, tenemos problemas por una explosión urbana desordenada, ciudades sin planificación, ríos obstruidos. Entonces, eso genera problemas.
“Nada logramos con tener desarrollo urbano, si no está conectado con buenas vías de comunicación y nuevas formas de transporte. Ahora, los jóvenes compran en grandes torres de apartamentos allá en la montaña, pero tenés la misma vía de acceso y no tenés un transporte público. Entonces, automáticamente piensan ‘ocupo mi carro para llegar allá'”.
- ¿Quién es el responsable?
- Desde los mismos gobiernos locales que dan los permisos de construcción, pero que no van de la mano con el Gobierno Central y la definición de nuevas vías de comunicación, de paradas de buses.
“Todos queremos electromovilidad, pero de qué nos sirven 200 carros eléctricos en una presa. No contaminamos, pero es la misma presa.”
- Sin facilidades mucha gente no encuentra otra alternativa más que comprar un carro
- Eso es parte de lo que se quiere hacer. Es decirle a la gente que puede tener carro, pero que tenga alternativas como un tren eléctrico.
- Pero el tren eléctrico es un proyecto que lleva varios gobiernos sin que se ejecute
- Muchas veces los proyectos no trascienden los gobiernos y eso es lo que se quiere buscar también, un proyecto fácilmente digerible para todos los gobiernos. El tren eléctrico es un proyecto muy grande, pero vamos a temas pequeños, como la reorganización de los buses, la sectorización y la seguridad. A veces, a la gente no le gusta usar el transporte público por seguridad; todo va de la mano.
- ¿Qué hay de los planes para incorporar buses eléctricos?
- Se está trabajando en una solución para las concesiones de buses, la edad de los buses y aprovechar la coyuntura que hay para hacer un cambio de unidades e incorporar buses eléctricos, con un modelo de financiamiento que permita a los operarios hacer los cambios con alguna especie de colaboración.
- Usted vivió en Alemania y conoce bien la organización del transporte en ese país, ¿algún día podremos pensar en algo así?
- Es posible, pero requiere un poco de todos, del apoyo del Gobierno Central y del gobierno local, y también de un cambio de cultura de los ciudadanos de decir: ‘yo puedo ir en bicicleta al lugar de trabajo’, ‘sí puedo ir en bicicleta a la escuela’. Va de la mano con un cambio de cultura.
“Para que los niños vayan a la escuela en bicicleta seguros, tenemos que generar los espacios, y Costa Rica ha sido una sociedad que ha crecido en torno a la idea de que las calles son para los carros.
“Si queremos generar un cambio tendría que involucrar a todas las partes. Que los vecinos estén dispuestos a ceder, a no tener mi entradita o jardincito, pero voy a tener una ciclovía. Que los usuarios no tengan calle de dos carriles, sino uno para bici y otro para carro.
“En Montes de Oca hay ciclovía, pero los carros se estacionan en ese espacio. Vea el caso del ferrocarril, inicialmente ocurrían choques contra el tren todos los días. Luego, los choques eran contras las agujas, pero desde hace un tiempo para acá hay menos choques. Lo que se busca es generar poco a poco un cambio de mentalidad en la gente”.
- Pero construimos carreteras que no se integran con la infraestructura para el transporte público o la intermodalidad
- Es que muchas son proyectos viejos que estaban hace 20 años cuando algunos temas no eran tan relevantes. Los proyectos nuevos, los que se liciten de ahora en adelante sí incluyen elementos de cambio climático, y para los usuarios.