Desde las 8 de la mañana de ayer, domingo, una buena parte del cielo de la “ciudad de los mangos” fue cedida por las aves a decenas de cometas de papel, que volaron a sus anchas durante horas con ocasión de celebrarse el I Festival de Papalotes Alajuela 2003.
Niños, jóvenes y adultos que días antes participaron en talleres de confección de papalotes, organizado por el Ministerio de Cultura Juventud y Deportes, llegaron al polideportivo Monserrat con la ilusión de ver despegar sus creaciones.
Wady Vado, instructor en los cursos, dijo que estos están enfocados a mantener una tradición y a crear espacios para la unión familiar. “Damos las técnicas básicas para hacer papalotes, pero nuestro énfasis está en que las personas puedan transmitirlas y, a la vez, tengan una actividad con la que puedan compartir el tiempo libre en familia”.
Combinando materiales muy comunes como bolsas de basura, cintas, varillas de bambú, verolís y madera, con otros más modernos, como silicona, tela, seda y papel cebolla, se hicieron trabajos muy interesantes.
“Nos dimos cuenta, además, de que hay muchas personas que comparten la afición”, agregó Vado.
Algunos optaron por estilos tradicionales como el barrilete y la cometa, y los más atrevidos prefirieron los tipos plano, caja, ave, flexible, serpiente o libre .
Ayer fueron premiadas unas diez personas en las diferentes categorías.
“A mí lo que más me gusta de esto es que uno viene a compartir”, expresó Wálter Solano, uno de los ganadores en la categoría de “papalote doble”. Él hizo el suyo con plástico y bambú.
Los talleres de papalotes se reanudarán en mayo con cursos impartidos en los demás cantones de la provincia alajuelense. Todos los trabajos saldrán a jugar con el viento en noviembre próximo, durante el Gran Festival de la Creatividad , que se realizará en un lugar aún no definido.
Si a usted le interesa participar en los talleres, puede llamar a los teléfonos 442-002/442-7047.