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Francisco Morales, ministro de Trabajo, propuso ayer al Sindicato de Japdeva (Sintrajap) reiniciar el diálogo sobre la modernización de los puertos de Limón y Moín el próximo viernes.
Como condición, el Ministro pidió a Sintrajap deponer el movimiento de tortuguismo aplicado desde hace 14 días en los muelles.
A cambio, el Gobierno retiraría de inmediato los oficiales de la Fuerza Pública que vigilan los puertos desde hace 11 días.
Morales se reunió con el Sindicato en las instalaciones de esta organización a las 11 a. m. en la ciudad de Limón.
Los muelleros exigen al Gobierno abortar el plan de concesionar los puertos a la empresa privada, pero la administración Arias insiste en que esa es la mejor opción para el país.
Pese a la presencia policial, el tortuguismo afecta, en especial, el muelle de Limón porque allí los importadores dependen de los operadores de grúa, quienes siguen en tortuguismo.
Insatisfechos. Liroy Pérez, secretario de prensa de Sintrajap, afirmó ayer que la propuesta del Ministro los dejó insatisfechos y en una “situación incómoda”.
Según explicó, ellos esperan una contrapropuesta sobre los puertos desde hace muchos días, y ahora desconfían de que efectivamente les sea presentada.
Por ello, de momento continuarán con el tortuguismo.
El Gobierno sostiene que la concesión es la mejor opción para modernizar Limón y Moín.
Sintrajap, en cambio, propone que la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva) invierta $70 millones en los muelles durante tres años, para modernizarlos.
El Sindicato de Trabajadores de Japdeva (Sintrajap) también aceptaría la concesión de un nuevo puerto, si el Gobierno permite a la entidad invertir.
Sintrajap también reclama el pago de ¢450 millones por concepto de beneficios laborales que, antes la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) impedía pagar por considerarlos excesivos. La Aresep ahora no se opone.
Sobre ese pago, Morales sostuvo ayer que el departamento legal de Japdeva elabora un criterio para permitir a la junta directiva de la entidad tomar una decisión.
Pérez expresó: “Con el dinero no pudo decir nada; intentó localizar a Wálter Robinson pero al parecer no estaba disponible”.
