Un asegurado común tiene, con frecuencia, muchas dificultades para conseguir una cita médica. No obstante, cuando ese asegurado está en prisión, las complicaciones se multiplican pues ya no es solo difícil obtener la cita, sino también acudir a esta.
Transportar a los prisioneros a clínicas y a hospitales es actualmente el principal problema para el sistema de salud de la administración de Justicia.
De hecho, esa dificultad puede ser causal para que un reo reciba el beneficio de casa por cárcel.
Por una parte, faltan vehículos para transportarlos, y, por otro, no se ha podido coordinar con la Caja Costarricense del Seguro Social para calendarizar las citas, de manera que no haya que llevar a varios reos, a la misma hora, a centros médicos diferentes.
Además, debe tomarse en cuenta que no siempre es posible llevar a varios reos juntos. Esto depende de sus problemas de convivencia y del grado de peligrosidad.
Según datos del jefe médico de la Unidad de Admisión de San Sebastián, en San José, Armando Silva, un estudio realizado entre el 1.° de enero y el 19 de setiembre reveló que se realizaron 1.300 salidas de reos para consulta externa en el hospital San Juan de Dios y la Clínica Moreno Cañas.
También hubo 148 casos de emergencia y 550 salidas nocturnas, cuando ya no labora el personal médico de planta.
Gracias a ese estudio, se dieron cuenta de que, en tres casos, el recluso se reportó enfermo para recoger droga en un hospital.
La fila
Con una población de características distintas en el centro Gerardo Rodríguez, en San Rafael de Alajuela, los problemas son similares.
“Aquí, el incidente de queja más frecuente es por traslados a citas, pero a veces chocan seis citas y solo hay dos móviles”, explicó Mario Rodríguez, director del penal.
Para él, debería procurarse alguna consideración para los privados de libertad.
Puso el ejemplo de un reo que necesita ser operado de una hernia en el Hospital México, donde hubo un retraso por el cierre temporal de los quirófanos.
“El Juzgado Ejecutor de la Pena nos exige que se le haga la operación, pero el médico del hospital dice que el paciente tiene que hacer la fila”, relató Rodríguez.
La queja por trasporte la reitera José Luna, interno de 77 años del centro del Adulto Mayor, también en San Rafael de Alajuela:
“Estoy esperando una operación en la próstata y otra en la vista, pero voy un poco atrasado porque no hay carro que me lleve a las citas”, explicó.