El obispo de Ciudad Quesada, monseñor José Manuel Garita Herrera, instó a los grupos políticos y aspirantes a cargos públicos a evitar insultos y divisiones en el contexto de las elecciones presidenciales de febrero de 2026.
“Pedimos la bendición de Dios para Costa Rica, recordando especialmente los desafíos y retos que tenemos pendientes, como el año electoral que se avecina. Que sea un tiempo respetuoso y propositivo, no un escenario para enfrentamientos, insultos o divisiones, de las cuales ya tenemos demasiadas en este país, lamentablemente”, expresó el religioso en su homilía del 1.º de enero.
Entre los desafíos destacó el crimen organizado y el aumento en los homicidios. Esta problemática, dijo, es como “una lacra que nos ha golpeado profundamente en el último tiempo”.
Costa Rica cerró 2024 con una cifra aproximada de 874 homicidios, es decir, 31 menos que en 2023, cuando se registraron 905. A pesar de la disminución, el año pasado se posicionó como el segundo más violento desde que el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) inició estos registros hace 26 años.
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En su mensaje, Garita también exhortó a las autoridades y a quienes aspiran a cargos públicos a priorizar el fortalecimiento de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), con especial énfasis en resolver las persistentes listas de espera y la crisis de médicos especialistas.
A finales de octubre, 185.539 personas aguardaban por una cirugía en hospitales de la CCSS, con tiempos de espera promedio de 411 días, según la especialidad quirúrgica. Sin embargo, dependiendo del hospital y el tipo de tratamiento requerido, la espera podía extenderse hasta casi tres años, según datos del Área de Estadística en Salud de la Gerencia Médica de la CCSS.
“Es momento de buscar soluciones al problema de las pensiones, de ofrecer respuestas efectivas a los pendientes en infraestructura vial y la congestión vehicular, y, por supuesto, de trabajar en el mejoramiento integral de la educación”, enfatizó el prelado en su mensaje en la catedral de Ciudad Quesada.