A partir de hoy, al puesto de Ofelia Taitelbaum lo antecede un prefijo: exdefensora de los habitantes. Ayer´le venció su nombramiento.
Al terminar su periodo de cuatro años, su meta es volver a ejercerlo, pero no solo compite con otros nueve en la lista de postulantes, sino también en el Congreso con dos temas urgentes: la reforma al Reglamento de la Asamblea Legislativa y la elección de los 12 magistrados suplentes de la Sala IV.
Hoy inicia sus vacaciones indefinidas como exdefensora.
Es muy difícil porque, de un pronto a otro, ya no soy defensora. Ayer le decía a mi marido: ‘Mirá, ¿me habré equivocado en volverme a presentar?’ Es que defender derechos humanos es maravilloso, pero a veces incomprendido.
La Defensoría tenía temas “chineados” como fertilización in vitro y derechos de personas con orientaciones sexuales diversas. En ellos tuvo un gran impacto mediático, pero ninguno está resuelto.
Trascendieron como “temas chineados”, pero no es así. Fueron importantes y hubo que hacer la diferencia porque ni siquiera se hablaba de ellos antes. Esa es una lucha que está inconclusa, pero creo que en estos cuatro años de mi gestión, la sociedad se abrió, al menos, para discutirlo.
El 21 de diciembre del 2012 usted dijo que se podía practicar la fertilización in vitro en el país, pero aún no hay ley ni reglamento.
Me da pena, me avergüenza. Estamos celebrando nuestros triunfos en La Haya (contra Nicaragua), pero no acatamos otro fallo que nos pone en entredicho como país respetuoso de los derechos.
¿Qué otros temas se quedaron por fuera de su gestión?
Yo quería una Defensoría desplazándose por las comunidades, yendo, recibiendo denuncias. Y lo hemos logrado, muy poquitito, porque no pude tener más empleados. No pude crear ni una sola plaza.
”Nos sigue preocupando el tema de la Caja y las pensiones. Mientras la Caja dice que estará saludable hasta el 2030, la Supen dice que entrará en problemas a partir del 2017, ¡y el 2017 es ya! Es una barbaridad porque ese es el esfuerzo que hacemos todos los trabajadores.
”El otro tema es el de la transparencia. La gente tiene cada vez menos confianza en el sector público y a mí eso me preocupa. Vamos a empezar a montar un índice de transparencia con 50 entidades”.
En su primer año dijo que la Defensoría volvería a ser como en los años 90, que tendría más injerencia directa en las instituciones.
En la Defensoría lo más importante es la magistratura de influencia. Si te perciben como un ente que hace las cosas fuerte, te van a hacer caso. Con una llamada de teléfono o una cartita, las cosas se solucionan. Además, cuando llamamos la atención no es porque yo digo sino porque está en la ley. Si no tenés un jerarca que pueda ejercer esa magistratura, la defensoría no funciona adecuadamente.
¿Qué tipo de persona debería de quedar en su puesto, si usted no lograra volver a ocuparlo?
Debe ser conciliadora, negociadora, de diálogo. De mente amplia. Comprometida con los derechos humanos en toda la extensión de la palabra. Dios libre nos llegue a la Defensoría una persona de estas que se ha manifestado abiertamente en contra de todos estos temas.
¿Cómo interpreta usted que los diputados se vayan a receso antes de elegir un nuevo defensor?
No es correcto. Denota (y es muy triste que yo lo diga) como que la Defensoría no tiene importancia. Dicen que cuál es la carrera, que no hay ninguna, que ahí se queda el adjunto. Ahí ya le bajan el piso a la Defensoría, al ente defensor de los derechos humanos.
¿En qué le perjudica a la Defensoría que se quede el adjunto?
En muy poco. El adjunto ha sido magnífico. Pero él asume con algunas restricciones administrativas, no puede ni contratar ni despedir. No es lógico.
Hace cuatro años usted decía que la elección de defensor no debía ser en periodo electoral.
Es que la elección del defensor tiene un montón de ruido innecesario, todo puede ser una negociación: “vos me das el voto para el magistrado o el político y yo para defensor”. Debería haber una fecha cierta, a mitad de periodo. Eso lo que va a hacer es que la elección sea mucho más nítida y menos influenciada por candidatos políticos.
Varios diputados dicen que es posible que temas como FIV y diversidad le pasarán factura en la elección. ¿Lo previó?
Si actuara pensando si me van o no a reelegir, no haría lo que tengo que hacer. Si eso me cuesta a mí no ser reelegida, bienvenido. A veces hay que plantarse sin pensar si esto te va a costar algo. No me arrepiento de nada y lo volvería a hacer.