Alajuela. Tanto el Ministerio Público como el Instituto Nacional de Criminología se opusieron a que se conceda la excarcelación a Edwin Aguirre Varela, condenado por un triple homicidio ocurrido en 1990 en Guacimal de Puntarenas.
Los criterios los emitieron ayer durante una audiencia privada que empezó a las 2 p. m. y que duró 55 minutos ante el Juez Ejecutor de la Pena de Alajuela, Aníbal Loaiza.
Durante el trámite judicial también Edwin Aguirre argumentó que está en pleno derecho de solicitar la libertad porque cumplió la mitad de la pena. Agregó que está arrepentido del crimen.
Entre los argumentos a favor expuso que durante los once años en prisión concluyó los estudios secundarios, se casó, tiene dos hijos y solicita una oportunidad para reintegrarse a la sociedad.
A partir del momento en que concluyó la audiencia, el Juez tiene un plazo de cinco días hábiles para emitir la resolución. Lo resuelto puede ser apelado ante un tribunal superior.
Esta es la segunda ocasión que Aguirre Varela pide la excarcelación, pues en noviembre pasado el Tribunal de Juicio de Puntarenas había rechazado una solicitud para liberarlo.
Graves hechos
Edwin Aguirre fue condenado en noviembre de 1991 a descontar 55 años de cárcel, que fueron readecuados a 25 años, al encontrarlo el Tribunal de Juicio de Puntarenas responsable de los homicidios de José Antonio Navarro Zúñiga, José Ángel Sequeira Cortés y Juan Hernández Castillo.
Estos hombres se encontraban pescando camarones el 29 de diciembre de 1990 en el río Guacimal, en Puntarenas, cuando fueron sorprendidos por Aguirre. Este en aquella oportunidad alegó que los pescadores usaban una sustancia que envenena el agua y eso lo enfureció.
Las víctimas fueron localizadas decapitadas y con múltiples heridas en sus cuerpos.
Precisamente ayer, el fiscal Luis Soto expuso que el delito por el cual se condenó a Aguirre fue muy grave y por tanto debe continuar preso.
Manifestó que Aguirre es un hombre al parecer muy agresivo que lo demostró con los daños que provocó a las víctimas y en su criterio todavía no está preparado para abandonar la prisión.
Entre tanto, Edwin Aguirre insistió que está arrepentido de los delitos que cometió, que en prisión adquirió mucha madurez, tiene esposa y dos hijos.
Sostuvo que ya cumplió la mitad de pena, además, que tendrá un domicilio fijo y un trabajo pues una vez en libertad instalará un taller de ebanistería.
Edwin Aguirre permanece recluido en la Unidad de Admisión de San Ramón, a donde fue trasladado recientemente del Centro Penitenciario La Reforma.