Visitantes de más de 30 países se reunieron esta semana en Costa Rica antes de seguir su viaje a Panamá y participar en la Jornada Mundial de la Juventud que presidirá el papa Francisco.
Los mexicanos aprendieron a recolectar y tostar café y les llevaron mariachis; los ingleses tuvieron competencia de baile contra los dominicanos y los húngaros se van listos para devolverles la invitación a los ticos.
Así terminaron las actividades de Días en las Diócesis, la celebración en que los católicos se reunieron en suelo nacional previo a la cita con el sumo pontífice, en Panamá. Este sábado comenzaron a despedirse los jóvenes para seguir su viaje al país anfitrión este encuentro, que será del 22 al 27 de enero.
“Les tengo un mensaje muy importante a todos los costarricenses, están invitados a Budapest en el 2020”, dijo el visitante húngaro Polaj Forgacs.
Dice que después de conocer a la gente, el gallo pinto y la cerveza local, está ilusionado de recibir a los ticos en un congreso internacional que tendrá la iglesia en su país dentro de un año.
La Arquidiócesis de San José despidió a los miles de jóvenes con música y una eucaristía presidida por el arzobispo de San José, monseñor José Rafael Quirós, en el Parque La Sabana, en medio de banderas de Alemania, Corea del Sur, Brasil y México.