Una donación de ¢22 millones por parte de la embajada de los Estados Unidos financiará un estudio hidrogeológico en Finca 6, uno de los cuatro sitios cacicales ubicados en el delta del río Diquís, en Osa, Puntarenas, que son patrimonio mundial.
Esa investigación permitirá medir el nivel de humedad del suelo que rodea a las esferas precolombinas ubicadas en ese terreno en específico, y así determinar la forma de conservarlas mejor.
"Encontramos que el nivel freático, el del agua, es muy alto, y eso tiene un gran impacto en el estado de conservación de las esferas... Ha estado lloviendo tan fuerte, que el agua cae de la montaña y lava el terreno", explicó Marlin Calvo, jefa del departamento de Protección del Patrimonio del Museo Nacional, encargado de velar por el cuido de los asentamientos precolombinos de Osa.
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Según la especialista, aun cuando la piedra de las esferas es dura y resistente, también es vulnerable a la humedad.
"Lo recomendable es que no estén ni muy secas, ni muy húmedas... Tendríamos que tomar la decisión de excavar las esferas y crear toda una serie de canales de drenaje, pero hasta que no tengamos el estudio, no podemos decidir", agregó Calvo.
El estudio hidrogeológico tardaría un año. Consiste en la medición semanal de la cantidad de agua presente en la tierra que se encuentra alrededor de las esferas y en toda el área donde hay vestigios arqueológicos.
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Todavía no se ha asignado la firma responsable de ejecutarlo.
¿Por qué en Finca 6?
Junto con Finca 6, tres sitios más (Grijalba-2, Batambal y El Silencio) fueron declarados patrimonio de la humanidad por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) en el 2014.
Aunque las escorrentías en esta zona de manglar afectan los vestigios arqueológicos de esos cuatro lugares, el estudio se hará solamente ahí porque es la único sitio que está abierto al público.
Además, ese es el más afectado por el agua, debido a que se ubica a un mayor desnivel en comparación con los otros tres.
Si los ¢22 millones otorgados alcanzan, también se delimitarán esas cuatro áreas de tierra donde hay evidencia arqueológica.
El aporte
La donación fue concedida a Costa Rica por medio del Fondo de Embajadores para la Preservación Cultural, una iniciativa del Departamento de Estado de Estados Unidos.
Desde el 2001, esa iniciativa ha entregado $55 millones a más de 870 proyectos en más de 125 países.
La ayuda económica fue anunciada este lunes 10 de julio en el Museo Nacional. En el acto participaron Rocío Fernández, directora del Museo; Sylvie Durán, ministra de Cultura y Juventud, y Fitzgerald Haney, embajador de Estados Unidos.