Dónald Murillo Pizarro, gerente del Banco Hipotecario de la Vivienda (Banhvi), reconoció desde el 17 de mayo anterior que fue él quien ordenó a las instituciones financieras que no tramitaran más bonos ordinarios de vivienda.
El cierre de las ventanillas en bancos, mutuales y cooperativas dejó a las familias más pobres sin la posibilidad de pedir un subsidio para tener casa.
Ahora, la auditoría interna del Banhvi investiga si Murillo tenía potestades para girar esa directriz sin el aval de la junta directiva y del entonces ministro del ramo, Helio Fallas.