Si por algo se destacó el discurso del nuevo presidente del Congreso fue por la fuerza del llamado que hizo para rescatar la credibilidad del trabajo legislativo con hechos y resultados.
Este abogado de 65 años, exministro de Educación y exdiputado, pidió a los nuevos legisladores respeto hacia al Congreso como centro de la vida democrática del país, cumplir con la racionalización del gasto y ejercer una oposición equilibrada durante los cuatro años de gestión que tienen por delante. Está por verse si le hacen caso.