La fracción del Partido Liberación Nacional (PLN) le exige al Gobierno de la República que reintegre a sus puestos a los funcionarios que están bajo supuesta persecución política, antes de darle el apoyo al Segundo Presupuesto Extraordinario del 2014.
Así lo confirmó el jefe liberacionista, Juan Luis Jiménez Succar, quien indicó que es un acuerdo unánime de la bancada verdiblanca no dar sus 18 votos para esa iniciativa de ley, hasta que no haya una señal clara de Zapote, para perdonar a los empleados públicos que sean objeto de procesos administrativos vigentes o por realizar.
"La fracción decidió que, mientras no devuelvan a su cargo original a los empleados a los que se les abrió un órgano director, no votaríamos el Presupuesto Extraordinario", dijo el diputado.
Según datos en poder de la bancada del PLN, el Ministerio de Hacienda cree que el Segundo Presupuesto Extraordinario de este año debe aprobarse antes del 18 de noviembre, pues de lo contrario no se podría ejecutar los ¢21.000 millones incluidos en ese plan.
Jiménez comentó que la respuesta de Zapote a la pretensión liberacionista es que estudiarán los casos de los perseguidos, de quienes el jefe del PLN se reservó el nombre, pues adujo que los procesos administrativos son confidenciales.
"Tenemos una lista de casos, se la enviamos al ministro de la Presidencia (Melvin Jiménez) y nos dijeron que estudiarían el acuerdo de la fracción hoy jueves", explicó el legislador.
Ante la negativa de Liberación Nacional de ceder sus votos para que se apruebe ese Presupuesto, la presidencia legislativa intenta ejecutar una norma según el artículo 180 del Reglamento, para darle trámite al expediente.
Aunque ya el presidente legislativo, Henry Mora, intentó una vez ese trámite rápido, no tuvo el apoyo suficiente para poner la iniciativa en el primer lugar de la agenda.
Jiménez enfatizó que la fracción liberacionista amenazó con presentar una gran cantidad de mociones en cada uno de los días establecidos para ello y usar la palabra en todos los tiempos a que tengan derecho.
"Si lo hacen a la brava, eso abriría la guerra entre el PLN y el Gobierno, no iríamos a las sesiones extraordinarias de Hacendarios, presentaríamos mociones para los cuatro días y todos usaríamos la palabra", comentó Jiménez.
La Nación intentó conversar con Daniel Soley, viceministro de la Presidencia, sin embargo no contestó la llamada.