La carga y descarga de mercadería en puerto Limón todavía sufre los efectos del tortuguismo sindical, pese a que la Policía tomó el control de las instalaciones desde la madrugada del jueves.
La Fuerza Pública es incapaz de agilizar las operaciones porque los operarios de las grúas portuarias continúan con el tortuguismo ordenado por el Sindicato de Japdeva (Sintrajap) desde el lunes pasado.
Según Milton Grijalba, oficial de la Policía, el problema es la ausencia de más expertos en el manejo de ese tipo de grúas.
La Fuerza Pública pudo eliminar el tortuguismo aplicado por Sintrajap en la entrada del muelle, en donde los empleados retardaban el ingreso de los furgones.
Pero ayer de nuevo se formaron filas de varios kilómetros desde el muelle a causa del tortuguismo de los operadores de grúas.
Pablo Muñoz, operador de la grúa pórtica que atiende los barcos, informó de que en el país solo hay 21 expertos en el manejo de esas máquinas y todos son de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva).
Según Muñoz, en condiciones normales la grúa mayor baja 40 contenedores por hora de los barcos, pero durante este movimiento solo mueve unos diez.
Una situación similar ocurre con las grúas móviles que mueven los contenedores dentro de los patios del puerto.
En puerto Moín, también controlado por la Policía, el tortuguismo ya no tiene efecto porque allí no se depende de las grúas pórticas, sino de los estibadores privados y de las grúas de los barcos.
El operador Muñoz declaró que, si no se logra frenar la concesión de los puertos del Caribe, lo más importante es lograr un compromiso del Gobierno para que los trabajadores les paguen sus garantías laborales y una indemnización.
Hartos. El tortuguismo ya empezó a provocar la desesperación de los traileros. Ayer, desde el Parque Vargas ubicado junto al muelle, se escuchaba el constante sonido de las bocinas de los furgones.
El trailero Mariano Sibaja, por ejemplo, se quejó de que pasó toda la noche en espera para poder mover solo dos contenedores hacia un patio cercano, cuando en condiciones normales mueve hasta 12.
Además, los choferes deben buscar algún rincón para hacer sus necesidades fisiológicas, agregó Sibaja, vecino de Alajuela.
Otro chofer, Luis Garro, agregó: “El problema es que el operador de la grúa es operador de Japdeva. La Policía no tiene un operador”.
En puerto Limón se mueve mercadería general, como químicos o insumos de maquila. En Moín, en cambio, se trasiegan bienes perecederos, como frutas.
Los traileros también se quejaron de que los operarios usan solo una grúa móvil en vez de tres.
Ayer, Ronaldo Blear, secretario de Sintrajap rechazó una cita para dialogar con Wálter Robinson, presidente de Japdeva. La negativa se sustentó en que Robinson pidió una reunión a solas.
Más bien, la Federación de Trabajadores Limonenses (Fetral) acordó continuar con el tortuguismo.