El plenario legislativo aprobó este lunes, en segundo debate, un proyecto de ley que eliminará las anualidades de los próximos dos años a los empleados públicos.
A favor de la iniciativa, se pronunciaron 39 legisladores, mientras que 11 votaron en contra.
El proyecto era uno de los que habían dejado pendiente los congresistas antes de irse al receso.
Básicamente, el plan evitará que se sumen a los salarios de los funcionarios públicos las anualidades correspondientes a los años 2021 y 2022. El texto respeta las anualidades acumuladas de cada servidor y su sueldo completo.
Con esa suspensión, el Estado podría ahorrarse ¢67.000 millones, entre el Gobierno Central y las instituciones autónomas.
La anualidad es, básicamente, un pago extra sobre el salario base por cada año laborado y se trata del incentivo salarial que más recursos consume en el Gobierno, con un efecto acumulativo que crece conforme pasa el tiempo.
Votaron a favor 12 legisladores de Liberación Nacional (PLN), nueve de Acción Ciudadana (PAC), siete de Restauración Nacional (PRN), cinco de la Unidad Social Cristiana (PUSC), cinco del bloque Nueva República (PNR) y la independiente Ivonne Acuña.
En negativo, se pronunciaron tres del PUSC, dos del PLN, dos de Integración Nacional (PIN), uno del Republicano, uno del Frente Amplio y dos independientes.
Entre los votos negativos a la iniciativa estuvieron los cinco diputados que se comprometieron a favorecer la agenda de Célimo Guido. Se trata de Shirley Díaz, del PUSC; Wálter Muñoz y Patricia Villegas, del PIN; Dragos Dolanescu y Erick Rodríguez, independientes.
La iniciativa tuvo los siguientes votos favorables:
PLN: Luis Antonio Aiza, Carlos Ricardo Benavides, Luis Fernando Chacón, Ana Lucía Delgado, Jorge Fonseca, Silvia Hernández, Wagner Jiménez, Yorleny León, Aida Montiel, Karine Niño, Paola Valladares y Gustavo Viales.
PRN: Mileyde Alvarado, Carlos Avendaño, Eduardo Cruickshank, Giovanni Gómez, Melvin Núñez, Xiomara Rodríguez y Floria Segreda.
PAC: Luis Ramón Carranza, Laura Guido, Carolina Hidalgo, Catalina Montero, Víctor Morales, Nielsen Pérez, Welmer Ramos, Enrique Sánchez y Paola Vega.
PUSC: Pablo Abarca, Erwen Masís, María Vita Monge, Rodolfo Peña y María Inés Solís.
Bloque Nueva República: Ignacio Alpízar, Carmen Chan, Nidia Céspedes, Harllan Hoepelman y Jonathan Prendas.
Independientes: Ivonne Acuña.
En contra del plan para ahorrar el gasto en anualidades, votaron:
PUSC: Óscar Cascante, Aracelly Salas y Shirley Díaz
PLN: Franggi Nicolás y David Gourzong
Republicano: Otto Roberto Vargas
PIN: Wálter Muñoz y Patricia Villegas
Frente Amplio: José María Villalta
Independientes: Dragos Dolanescu y Erick Rodríguez
Discursos antes de la votación
Antes de que se realizara la votación del segundo debate, el frenteamplista José María Villalta manifestó que consideraba lamentable que uno de los primeros proyectos que se apruebe en el nuevo edificio parlamentario sea el de eliminar las anualidades.
El legislador consideró que no es una solución justa y equitativa eliminar el pago de un plus salarial a los funcionarios públicos, pues alega que golpea “a la gente trabajadora”. En su lugar, adujo que se debe eliminar exoneraciones y beneficios a las grandes empresas.
Wálter Muñoz, del PIN, aseguró que el Congreso sigue sin entender “el diagnóstico de la situación de este país”.
Aunque votó a favor del proyecto, la oficialista Paola Vega criticó el plan. Manifestó que esa medida no es “ni el apocalipsis que unos pintan ni la panacea que otros dibujan”.
Vega lamentó que no se mantuviera el beneficio a los trabajadores que más han tenido que trabajar durante la pandemia, tanto el personal sanitario y médico, como las fuerzas policiales.
Según el independiente Erick Rodríguez, con ese proyecto no se ahorra nada y alega que es “un pichuleo”. Rodríguez, uno de los que apoya la agenda de Célimo Guido, adujo que iniciativas como esa es “seguir echándole más gasolina a un fuego que está ardiendo”.
“La efervescencia social va a ser mayor que el pichuleo de ahorro que significa”, indicó.