La defensa deCarlos Alvarado, declaró que aceptaría un eventual levantamiento del secreto bancario del presidente de la República, en el marco de la investigación de la Fiscalía General sobre el viaje en helicóptero que el mandatario realizó al hotel Hacienda Punta Islita, en Nandayure, Guanacaste, junto con su ministro de coordinación con el sector productivo, André Garnier.
Así reaccionaron, este miércoles, los abogados después de que Noticias Monumental informó de que la Fiscalía le solicitó a la Sala III el levantamiento del secreto bancario del gobernante.
“Se ha informado que el Ministerio Público habría pedido el levantamiento del secreto bancario en las cuentas del señor presidente de la República. Debemos aclarar que, en el expediente judicial no consta ninguna solicitud de esa naturaleza. En todo caso, si la hubiera, no nos opondríamos, pues don Carlos no tiene absolutamente nada que ocultar”, aseveró el abogado Rodolfo Brenes.
“Es más, desde el inicio de la investigación, aportamos la prueba bancaria original, que demuestra que don Carlos Alvarado pagó todos los costos asociados al transporte, hospedaje y alimentación del paseo familiar que realizó el año pasado, de manera que esta investigación simplemente va a corroborar lo que demuestra la prueba que ya consta en el expediente”, agregó el defensor.
En agosto del 2020, el Ministerio Público confirmó la apertura de una investigación a cargo de la Unidad Especializada de la Fiscalía General, bajo la causa 20-000044-0033-PE, en contra de Alvarado por el presunto delito de enriquecimiento ilícito.
El fin de la investigación es “determinar si existió o no alguna conducta delictiva” en el viaje a Guanacaste.
En aquella época, Alvarado afirmó que no existió delito y que la apertura de la causa le parece un exceso.
Según informó la Presidencia el año pasado, el mandatario viajó ida y vuelta a Punta Islita en helicóptero, junto con su esposa Claudia Dobles y su hijo.
La logística fue organizada por Garnier y, según Casa Presidencial, los costos del viaje fueron pagados en partes iguales entre ambos.
Uno de los vuelos en helicóptero fue realizado en una aeronave propiedad de una sociedad en la cual el ministro Garnier tiene participación accionaria, la empresa Servuss S. A..
Cuando el viaje se dio a conocer, la Presidencia envió copia de un correo electrónico que Garnier le envió a Alvarado, el lunes después del viaje, en la que indicó: “Adjunto la cuenta de reintegro del vuelo del viernes, según acordamos. Te agradezco, me deposites el 50%”, en referencia a $930 correspondientes a la mitad de los $1.860 que costó el viaje”.
En la misma comunicación, Casa Presidencial aportó copia de otro correo enviado a las 5:51 p. m., de este mismo lunes, en el que Mariela Murillo, en representación de la firma Servuss, le escribió al ministro Garnier lo siguiente: “Le agradezco el reintegro correspondiente a los costos por las horas de vuelo, según bitácora 1205 del día 7 de agosto por 3,1 horas a $600 la hora, para un total de $1.860”.
En cuanto al vuelo de regreso, la Presidencia aportó una factura de la firma Viajes Especiales Aéreos, con fecha del 10 de agosto, por un monto de $1.627, con un 50% del costo correspondiente al precio normal de ese servicio.
Sobre los gastos de hospedaje, indicó que el costo de la habitación del mandatario fue de $690 por tres noches y los de alimentación, por casi $500.
En agosto del 2020, para justificar que el propio presidente pagó los servicios que recibió en el hotel Hacienda Punta Islita, sus abogados mostraron un conjunto de facturas a nombre del mandatario y las enviaron a la Fiscalía General.
Sin embargo, el grupo de facturas tenía una extraña característica: tanto por alojamiento como por alimentación, la defensa aportó dos facturas distintas del hotel por el mismo monto, unas con impuesto al valor agregado (IVA) y otras sin IVA.
Además de que unas no desglosaban el impuesto y las otras sí, las facturas tienen distinta numeración y distintas fechas de emisión.
En el caso del alojamiento, la primera factura divulgada por Casa Presidencial fue la 125125, emitida el 10 de agosto por ¢414.000.
Cuando surgieron dudas de por qué no incluía el IVA, los abogados del presidente presentaron una nueva factura, la 125128, emitida el 12 de agosto, por los mismos ¢414.000, pero cambiando el desglose.
La primera factura solo cobraba ¢138.000 por cada una de las tres noches para un total de ¢414.000. La segunda cambiaba las cifras y cobra ¢122.124 por noche para un total de ¢366.372, más ¢47.628 de IVA.
Exactamente lo mismo ocurría con las facturas de alimentación.
El hotel Hacienda Punta Islita aseguró que todo se debió a una cadena de errores involuntarios por parte del funcionario que le cobró los servicios al presidente.
En ese momento, el abogado Rodolfo Brenes indicó: “El señor presidente canceló los servicios del hotel el domingo 9 (de agosto del 2020) en horas de la noche, eso porque salía temprano del hotel al día siguiente. Cuando uno sale de un hotel, generalmente le dan un papelito que es como el detalle de lo consumido; ese documento de la fecha del 10 de agosto, es un documento que físicamente le dieron a don Carlos en el hotel a su salida del mismo”.
“El segundo documento es ya la factura electrónica emitida por el sistema de facturación que le llegó con posterioridad. Ambos son por el mismo monto”, dijo.
“Ambas son por los mismos conceptos, nada más que una es la que le entregaron físicamente a don Carlos y la otra es la factura electrónica. La primera, que era la única que teníamos y fue la que se había revelado antes, por algún motivo no desglosaba el monto del IVA, la factura electrónica sí lo tiene”, agregó.
No obstante, la Dirección General de Tributación le restó validez a los segundos documentos, pues considera que no reúnen los requisitos de una factura electrónica.
El 13 de agosto, el presidente Carlos Alvarado aportó el estado de cuenta de su tarjeta de crédito a la Fiscalía General, con el fin de fortalecer las pruebas que demuestran que pagó todos los gastos del viaje que realizó al hotel Hacienda Punta Islita.
El estado de cuenta de la tarjeta, emitido por el Banco Nacional y certificado notarialmente, detallaba los pagos que realizó el mandatario por el hospedaje, la alimentación y el vuelo de regreso del paseo familiar que hizo a Nandayure, Guanacaste.