Los diputados aprobaron, este viernes a las 5:20 p. m., el proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, con 35 votos a favor.
Los partidos que apoyaron la reforma fiscal fueron Acción Ciudadana (PAC), Liberación Nacional (PLN) y la mayoría de la Unidad Social Cristiana (PUSC), así como uno diputado del Republicano Social Cristiano y el legislador independiente Erick Rodríguez Steller.
Del PAC votaron 10 diputados: Víctor Morales Mora, Nielsen Pérez, Mario Castillo, Paola Vega, Enrique Sánchez, Luis Ramón Carranza, Laura Guido, Welmer Ramos, Catalina Montero y Carolina Hidalgo.
En Liberación, votaron a favor 15 diputados: Luis Fernando Chacón, Carlos Ricardo Benavides, Silvia Hernández, Wagner Jiménez, Karine Niño, Roberto Thompson, María José Corrales, Daniel Ulate, Luis Antonio Aiza, Ana Lucía Delgado, Jorge Fonseca, Gustavo Viales, Yorleny León, David Gourzong y Aida Montiel.
Los diputados de la Unidad que respaldaron el plan fueron: Aracelly Salas, Pablo Abarca, Óscar Cascante, Rodolfo Peña, Erwen Masís, María Inés Solís, Pedro Muñoz y María Vita Monge.
También votaron a favor del plan fiscal el jefe del Partido Republicano Social Cristiano, Otto Roberto Vargas, y el independiente Erick Rodríguez Steller.
Lea aquí la versión final de la reforma fiscal que los diputados votaron a favor:
En cambio, los 22 votos negativos vinieron de 14 miembros de Restauración Nacional, uno del Frente Amplio, los tres de Integración Nacional (PIN), un voto de la Unidad Social Cristiana (PUSC), dos de Liberación Nacional (PLN) y uno del Republicano Social Cristiano (PRSC).
Los 14 restauracionistas que dijeron no al plan fiscal fueron: Carlos Avendaño, Ivonne Acuña, Carmen Chan, Harllan Hoepelman, Marulin Azofeifa, Eduardo Cruickshank, Mileidy Alvarado, Giovanni Gómez, Xiomara Rodríguez, Jonathan Prendas, Melvin Núñez, Nidia Céspedes, Ignacio Alpízar y Floria Segreda.
En el PIN, los tres votos negativos fueron de Zoila Volio, Walter Muñoz y Patricia Villegas. También votó en contra José María Villalta, del Frente Amplio.
Shirley Díaz se apartó del PUSC y votó en contra de la reforma tributaria, al igual que las congresistas Franggi Nicolás y Paola Valladares.
Finalmente, también votó en contra Dragos Dolanescu, del Partido Republicano Social Cristiano (PRSC).
El jefe de la fracción del PAC, Víctor Morales Mora, lamentó que el debate en torno a la reforma fiscal haya estado “sesgado por desinformación y mentiras” y reclamó contra los diputados que, específicamente, han intentado plantear que la reforma fiscal es un proyecto que pone todo su peso sobre los hombres de las familias más pobres y trabajadoras.
“Eso no es así, hay desinformación, tenemos datos para confrontar, cifras y números”, dijo el vocero oficialista.
Morales hizo referencia directa al hecho de que Xiomara Rodríguez, de Restauración, reclamara que le hubieran desechado mociones suyas para gravar las pensiones de lujo, pues le planteó que “si hay algo en lo que hay unanimidad es en atender las pensiones de lujo”.
El oficialista recordó que se aprobaron iniciativas legales en la administración anterior para reducir y cobrar contribuciones solidarias a las pensiones de lujo, así como acciones administrativas. Agregó que ya hay iniciativas de ley de Restauración, de una legisladora liberacionista y de la Unidad Social Cristiana en el mismo sentido.
“Estoy absolutamente convencido de que lo que haya que hacer para que desaparezcan las pensiones de lujo, esta Asamblea lo va a hacer. No se puede usar el argumento de que hay negligencia ni complicidad con el gobierno”, apuntó Víctor Morales.
El jefe del PAC también enfatizó que se ha mantenido abierta la puerta del diálogo con los sectores opuestos al plan fiscal, en particular los sindicatos. También dijo que, sobre ciertas discusiones que se abrieron en paralelo a la reforma fiscal, ya hay toda una agenda de proyectos complementarios, en temas como los impuestos a las cooperativas, los incentivos de los docentes y otros puntos.
Antes de que se diera la votación en primer debate del expediente 20.580, el jefe liberacionista, Carlos Ricardo Benavides, recordó que los dos intentos anteriores de reformas fiscales chocaron contra el “muro de los rigurosos criterios de la Sala Constitucional”, a pesar de que “una gran mayoría de diputados” habían ido adelante con las propuestas.
El primer intento al que se refirió fue durante el gobierno de Abel Pacheco (2002-2006), cuando él era diputado de oposición; el segundo, en la administración de Laura Chinchilla, cuando era ministro de la Presidencia. El primero se dio, rememoró, cuando la situación económica no era ni la mitad de crítica que la actual.
Benavides reprochó la posición que sostuvieron las fracciones que se opusieron a la reforma por ser, según dijo, la vía fácil de plantarse frente a la ciudadanía.
“Es más fácil decirle a la gente que no entiende bien lo que quiere oír, eso es refrescante para el corazón del populista, Decirle a la gente lo que quiere oír es fácil, ni hablar hay que saber”, reprochó el liberacionista.
El vocero del PLN añadió que, de la época de Abel Pacheco a hoy han pasado 16 años, sin poder aprobar una reforma fiscal que arregle la situación. “Este país quiere vivir como Suiza, pero pagar impuestos como algunos de los países centroamericanos”, dijo.
Agregó que este país es de los que tiene una mayor inversión social per cápita, pero no quiere pagar por eso, ni por la educación.
“Basta para muchos con decirle a la gente lo que quiere escuchar y, además, le aplauden a uno y los que estamos aquí, cayendo mal, poniendo la cara para que este país salga adelante, lo hacemos por tontos, porque queremos que caiga una medida por la que todo el país va a disfrutar”, apuntó Benavides.
“Creo que una mayoría de diputados hoy fue responsable, y fue responsable pese a el costo político que esto tiene”, dijo Erwen Masís, jefe de la Unidad Social Cristiana (PUSC).
Aun así, el jefe de los socialcristianos reconoció que la expectativa era tener más votos favorables. Aseguró que prevían contar con un voto más de Liberación.
“Sí, sí se esperaba esta cantidad, incluso se esperaba un poco más. Yo pues apuesto por la responsabilidad, creería que el gobierno es el indicado en generar lo necesario para que en segundo debate se cuente con los 38 votos.
Ambiente en las fueras de la Asamblea Legislativa.
Posted by nacion.com on Friday, October 5, 2018
Del criterio liberacionista se apartaron Franggi Nicolás y Paola Valladares, mientras que de los socialcristianos se apartó Shirley Díaz.
"Don Pepe lo que quiso decir es que uno tiene que ser fiel a sus convicciones, y fiel a mis convicciones yo no puedo estar de acuerdo con este plan fiscal”, anunció Nicolás.
La liberacionista dijo, enérgicamente, que el plan de gobierno del Partido Liberación Nacional para las pasadas elecciones no proponía gravar la canasta básica.
“Yo jamás les vendí a las personas este plan fiscal, que a todas luces es injusto para las personas”, dijo Nicolás.
”Doña Shirley (Díaz) ha sido muy clara en su posición, yo respeto muchísimo lo que ella ha decidido, es una compañera a la cual respeto mucho", dijo Erwen Masís sobre la decisión de la socialcristiana.
Los diputados liberacionistas prefirieron no hacer uso de la palabra antes del primer debate, en su lugar, prefirieron colocar pancartas en cada una de sus curules, desmintiendo una serie de mensajes erróneos que se han difundido en las redes sociales, en contra de la iniciativa tributaria.
En esos mensajes, desmienten que no se vayan a tocar las pensiones de lujo con el plan fiscal o que no pasaría nada si el proyecto legal no se hubiera aprobado.
También desmintieron que los libros, en todos sus formatos, vayan a pagar el impuesto sobre el valor agregado.
El viceministro de Hacienda, Nogui Acosta, reaccionó a la aprobación de la iniciativa legal y destacó la votación de la iniciativa, a pocos pasos del plenario del Congreso.
“Es el camino que nos va a permitir resolver la situación a la que nos enfrentamos, la posibilidad de poder allegar recursos al gobierno y poder, digamos, resolver la situación de corto plazo, y entrar en las discusiones de los proyectos de reforma a largo plazo”, manifestó el funcionario.
En opinión del funcionario, aún tras la votación de la reforma hay espacio para dialogar con los sindicatos, pues el trámite del proyecto de ley nunca fue negociable.
“El plan fiscal nunca estuvo dentro de la negociación, y quiero decir esto porque siempre se planteó la posibilidad de construir a partir del proyecto fiscal, la urgencia del déficit no nos permite no entrar a conocer este proyecto y avanzar”, dijo Acosta.
El siguiente paso: consultas y publicación
Apenas se aprobó la iniciativa fiscal y se revisó su votación, para dejarla en firme, el plenario aprobó una moción de orden para enviar a publicación el proyecto de Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas en el diario oficial, La Gaceta.
En la misma propuesta, se aprobó el envío de la iniciativa legal a consulta de las instituciones afectadas: Banco Central de Costa Rica (BCCR), Instituto Nacional de Seguros (INS), Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), los bancos del Estado y todas las municipalidades, a la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep), las instituciones autónomas y las universidades estatales, el Poder Judicial y el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE).
Todas esas instituciones tienen ocho días hábiles para responder la consulta que les hace la Asamblea Legislativa sobre los contenidos del plan fiscal. Esas consultas suspenden el trámite del proyecto durante dos semanas.
La moción fue aprobada con 56 votos y solo el restauracionista Eduardo Cruickshank votó en contra de ese trámite.
La vía rápida del plan fiscal prevé que se dé una consulta ante la Sala Constitucional. Esa acción requiere las firmas de 10 diputados. Eso significa que Restauración podría elevar esa consulta ante el tribunal constitucional, sin ayuda de otra fracción.
No obstante, el jefe de la Unidad adelantó que su fracción redactará un texto que podría enviarse a la Sala IV, para que los magistrados revisen el proyecto.
"Me parece que es sano, que fortalece el proyecto, que da garantías y este paso hay que darlo", aseveró.
Jonathan Prendas, diputado de Restauración Nacional, confirmó que su partido quiere que esa consulta se haga.
“Valorar la consulta de constitucionalidad, estamos hablándolo con los compañeros y otras facciones, para ver como vamos a solucionarlo y cómo vamos a entablarlo”, dijo Prendas.