La Asamblea Legislativa canceló este jueves un permiso solicitado por la diputada frenteamplista Ligia Fallas para celebrar, en el salón de Expresidentes del Congreso, un encuentro con cuatro diputados la Asamblea Constituyente de Venezuela, en el que se apoyaría al gobierno de Nicolás Maduro.
La cancelación sobrevino en medio de fuertes críticas del PLN, del PUSC, del Movimiento Libertario y de Alianza Demócrata Cristiana, partidos que consideraron inaceptable recibir, en el corazón de la democracia costarricense, a los emisarios de un órgano que el Gobierno de Costa Rica considera ilegítimo, que además suplantó las labores de la Asamblea Nacional de Venezuela y que la oposición de ese país califica de dictatorial.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Gonzalo Ramírez, anunció la cancelación a las 3:25 p. m.
Además, en una votación en el plenario, la mayoría de los legisladores declaró no gratos a los constituyentes, con excepción de cuatro frenteamplistas y de un independiente.
El Congreso argumentó asuntos de seguridad para retirar el permiso, porque no tiene los recursos para cubrir las horas extra del personal de seguridad necesaria para el evento, aunque la diputada frenteamplista Ligia Fallas, una de las organizadoras de la actividad, había ofrecido pagar las horas extra.
El presidente legislativo alegó que se requiere mucho personal para atender una actividad en la que se esperaba el ingreso de cien personas, de 1 p. m. a 6 p. m.
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Ligia Fallas, al enterarse de la noticia, afirmó: "Espero que suspenda también cuando traiga todos los panderetas a tirarse de panza".
Añadió que su intención era hacer un evento abierto a la prensa. Ella organizaba el acto junto con su compañero José Ramírez, con el partido Vanguardia Popular y otras organizaciones que no detalló.
"Fue un trato discriminatorio", dijo en relación con la cancelación del permiso. "Estamos tomando medidas en el marco legal de Costa Rica. Es sumamente vergonzoso que se tomen estas acciones, que se presenten mociones para que se niegue una acción democrática en la casa de la democracia".
Al consultársele por qué apoya a una Constituyente acusada de instaurar una dictadura, respondió: "El asunto es aclarar la situación. El Gobierno Bolivariano de Venezuela está democráticamente electo, con una asamblea legitimada por la constitución. Ese diálogo social al que llamó Nicolás Maduro es un diálogo en el que están invitadas todas las partes".
Ligia Fallas informó de que los gastos del evento con los constituyentes venezolanos se cubren con la colaboración de un grupo de personas y de organizaciones.
Declinó dar los nombres de los diputados constituyentes y, al consultársele si había estado en contacto con la inteligencia venezolana, evadió la pregunta.
Este medio supo que dos de los políticos son Aloha Núñez Gutiérrez, diputada constituyente, y Héctor Muñoz, coordinador de Cultura y Solidaridad con los Pueblos del Ministerio de Poder Popular para las Relaciones Exteriores de esa nación sudamericana.
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La embajada de Venezuela en San José solicitó a la Cancillería costarricense que se les diera a ellos dos un trato preferencial en el aeropuerto, permitiéndoles pasar por el salón diplomático, por ejemplo, y facilitándoles los trámites migratorios.
La Casa Amarilla rechazó la solicitud porque el Gobierno de Costa Rica no reconoce como válida a la Asamblea Constituyente de Maduro, al considerar que fue instalada de manera ilegítima.
"Si fuera a la inversa, si varios de nuestros diputados democráticamente electos quisieran ir a Venezuela para criticar a la Constituyente, estoy seguro que el régimen actual de Venezuela no lo permitiría", afirmó el canciller Manuel González.
Por su parte, Ligia Fallas insistió: "¿Por qué puede Antonio Álvarez Desanti (candidato del PLN) traer la oposición venezolana?", en referencia a Antonio Álvarez, candidato presidencial del PLN quien, al igual que el aspirante socialcristiano Rodolfo Piza, condenó la llegada de los constituyentes venezolanos.
Según un correo electrónico divulgado por el Movimiento Libertario, la decisión de cancelar el permiso la tomó el director ejecutivo a. i., Pedro Solano, "en virtud de evitar cualquier situación que ponga en riesgo la seguridad de la Asamblea Legislativa".
La Dirección añadió que las medidas que tomaría el departamento de Seguridad, para resguardar el evento, implicarían una fuerte erogación por concepto de tiempo extraordinario, cuya partida presupuestaria se encuentra muy limitada.
En el plenario, se sometió a votación una moción de Liberación Nacional (PLN) para declarar no grata la visita de los constituyentes venezolanos y para rechazar que se celebrara, en el Congreso, el encuentro en el que se defendería el gobierno de Nicolás Maduro.
Según la moción, la decisión se basa en que, el 17 de julio, una mayoría de diputados de Costa Rica censuró y condenó el ataque a la Asamblea Nacional de Venezuela, cuyas funciones fueron suplantadas por la Constituyente, a la que la oposición acusa de haber llegado al poder de manera fraudulenta y de ser la coronación de una dictadura por parte de Maduro.
Votaron a favor de rechazar a los constituyentes 37 legisladores del PLN, Acción Ciudadana (PAC), Unidad Social Cristiana (PUSC), Movimiento Libertario, Renovación Costarricense, Restauración Nacional y Alianza Demócrata Cristiana.
Votaron en contra cuatro del Frente Amplio, Ligia Fallas, Patricia Mora, Suray Carrillo y Jorge Arguedas, así como el independiente Carlos Hernández, exfrenteamplista.
Por su parte, el diputado liberacionista Rolando González, le exigió al candidato presidencial frenteamplista, el diputado Edgardo Araya, presente en el plenario esta tarde, que se pronuncie sobre la actividad organizada por Fallas y José Ramírez, del FA, porque adujo que no se valen medias tintas en este tema.
La actividad con los miembros de la Asamblea Constituyente impulsada por Nicolás Maduro, que el Gobierno de Costa Rica no reconoce, la organizaron los frenteamplistas Ligia Fallas y José Ramírez.
El Frente Amplio no rechazó el temprado el uso de las instalaciones del Congreso para el evento, como sí lo hizo la mayoría de partidos del parlamento.
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