Carlos Alvarado, presidente de la República, abogó por una política de ahorro energético luego de que el petróleo superó los $100 por barril, por primera vez en más de siete años, a causa de la invasión de Rusia a Ucrania.
El mandatario argumentó que Costa Rica todavía es dependiente del petróleo y que, ante conflictos en países productores, debe aplicar una política de ahorro en el consumo de energía.
“Seguimos siendo un país dependiente; somos un país importador. Tenemos que seguir haciendo las eficiencias, para reducir los márgenes de Recope, como se viene haciendo. Tenemos que ir cada vez más a alternativas. Muchos transportes públicos han pasado a la alternativa de gas LPG, del cual bajamos el precio también. Otras son las alternativas eléctricas; ciertamente, tiene un costo alto de transición, lo reconozco; eso es parte de la dificultad.
“Tenemos que, como ha hecho históricamente el país, porque viene la subida de los precios, como pasó en la guerra de Iraq, aplicar la política de ahorro del consumo energético. Cada vez que hay un conflicto bélico en un país productor, lo que Costa Rica ha recomendado es la política de ahorro energético”, afirmó el mandatario durante un evento sobre al Plan Nacional de Descarbonización.
El barril de crudo Brent alcanzó $100,04 el miércoles tras el anuncio de Vladimir Putin de la invasión a Ucrania, hecho que intensificó los temores de un conflicto a gran escala en el este de Europa. El petróleo WTI se cotizó a $95,54 por barril.
En las últimas semanas, la amenaza de una guerra desató en el mundo los temores en torno al abastecimiento de productos básicos clave, como el trigo y los metales, en medio de una demanda creciente por la reapertura de las economías tras los cierres por la pandemia de coronavirus.
El precio del petróleo venía en alza a causa de esas tensiones geopolíticas, hasta que este jueves el Brent superó la marca de los $100 por primera vez desde septiembre de 2014.
Al ser Costa Rica un país importador de petróleo, los costos del producto se ven reflejados en las tarifas locales, las cuales son fijadas por la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep).