Afuera, bajo la lluvia, un grupo de manifestantes cargaban una pancarta exigiendo: "impuestos a los ricos”. Al otro lado de las vallas, dentro del salón de sesiones de la Municipalidad de Cartago, el presidente Carlos Alvarado insistió en que eso es justamente lo que hace la reforma tributaria que impulsa su Gobierno en el Congreso.
“¿Quién tiene el peso de la reforma? La respuesta es que, si dividimos a Costa Rica, según su ingreso, en 10 grupos, los dos grupos de mayor ingreso son los que contribuyen con el 80%, (es decir) la reforma recae sobre el 20% más rico de los costarricenses. Eso es lo que llamamos progresividad", detalló el mandatario.
Durante las celebraciones de este 14 de setiembre, en la víspera del 197 aniversario de la Independencia, Alvarado tuvo que hacerle frente a los reclamos que le hicieron un grupo de opositores al plan fiscal, quienes abuchearon al Gobierno incluso cuando varios jóvenes deportistas que portaban la antorcha, encendían el pebetero.
El Consejo de Gobierno eligió sesionar a puerta cerrada, con presencia de medios de comunicación, funcionarios del Ejecutivo, miembros de la Iglesia y autoridades municipales.
Ahí, Alvarado sostuvo su posición sobre la impostergabilidad de la reforma fiscal para poder sacar el país a flote.
“Tenemos que tomar decisiones. Tenemos que resolver un problema muy similar, aunque con distintas condiciones, que el de hace 40 años y por eso he decidido avanzar en la dirección en la que estamos avanzando, con un proyecto que es polémico, que no es popular, pero que es lo correcto", enfatizó el gobernante.
En una referencia directa a las protestas contra la reforma, Alvarado recordó que las condiciones de dicho proyecto de ley las han puesto las distintas fracciones legislativas del Congreso, las cuales fueron electas directamente por los ciudadanos.
“Estamos trabajando entonces para tener ese acuerdo y para avanzar, estamos trabajando para que la carga recaiga de manera solidaria entre quienes más producen y tienen", manifestó.
El presidente además reafirmó su anuencia a tener a los rectores de las universidades públicas y a representantes de la Iglesia católica como mediadores en un diálogo con los sectores sindicales en huelga.
En el salón municipal, donde sonaban aislados los reclamos de los manifestantes, Alvarado aseguró que su administración se ha esforzado en atender las protestas de la forma más pacífica posible.
“Veo con dolor los problemas en servicios públicos, o bloqueos, o diferentes manifestaciones complicadas, que atendemos de la manera más pacífica, que hacemos el esfuerzo para que no perdamos esta tradición maravillosa”, expresó.
Al final de la sesión, el Gobierno volvió a salir a la plazoleta ubicada frente a la Municipalidad, e intentó cerrar el acto conmemorativo con naturalidad, cantando la Patriótica Costarricense frente al público que aún aguardaba. Pocos minutos después, jerarcas, manifestantes y curiosos se retiraron y el ambiente tenso dio paso al tradicional concierto del 14 de setiembre, a cargo de la banda nacional Malpaís.
Prometen intersección a cuatro niveles a más tardar en 2022
Durante la misma sesión, el Gobierno anunció que construirá la primera intersección a cuatro niveles en la principal vía de entrada y salida de Cartago, sobre la carretera Florencio del Castillo.
La obra se hará entre Taras y La Lima, donde inicia esa importante ruta entre la ciudad cartaginesa y San José.
Rodolfo Méndez Mata, ministro de Transportes, aseguró que el proyecto se licitará en el tercer trimestre del próximo año y se construirá antes del final de esta administración.
El jerarca tenía previsto mostrar los diseños la noche de este 14 de setiembre en la sesión del Consejo de Gobierno que se realizó en Cartago, no obstante, por limitaciones técnicas, no pudo hacerlo.
La intersección, aseguró el Ministerio, será “la más sofisticada" de todas las que se tiene planeado construir en el país.
La construcción de esa obra sería la primera parte del proyecto de ampliación de la carretera Florencio del Castillo, una obra prioritaria para Casa Presidencial, según el jerarca.
“Me duele mucho que, en un acto de celebración del 197 aniversario de la República, tengamos que discutir y plantearnos la reparación de una carretera. Eso se debe a que las administraciones de los últimos 36 años no lograron superar los problemas que se generaron con la crisis económica de los años 80”, dijo el ministro.
El jerarca de Transportes indicó que ya se convino la contratación de los estudios de factibilidad para ejecutar la obra con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
“No podemos poner la política antes que la técnica”, aseveró Méndez Mata, al explicar que, a diferencia de otras ocasiones, esta vez sí se priorizó el criterio de expertos antes de echar a andar el proyecto estructural.
"Es indispensable que hagamos la tarea técnica para que podamos pensar en generar obras que sean de calidad, al precio debido, en el tiempo debido", sentenció el jerarca de Transportes.
Según Méndez Mata, la intersección a cuatro niveles en la Florencio del Castillo es el proyecto más avanzado, de cuatro de similar magnitud, en los que trabaja su ministerio.
Los otros tres son las ampliaciones de las rutas 32 (a Limón), de la 27 (a Caldera) y la vía a San Carlos. La obra de infraestructura cartaginesa ya cuenta con los diseños del tramo entre Taras y La Lima, los cuales tuvieron un costo de $3,5 millones, amplió el ministro.
La obra de infraestructura se levantará con un préstamo del BID por $50 millones que, según Mendez Mata, ya aseguró el presidente Carlos Alvarado.
Méndez Mata dijo que el hecho de que el Gobierno adelante la construcción de la intersección abaratará el costo que tendrá después la ampliación de la carretera. Aseguró, además, que el Ejecutivo está “empeñado” en usar la figura de la concesión.
“De manera, señor Alcalde (de Cartago, Rolando Rodríguez), que si los recursos se perdieron en otra administración, esta administración los ha producido”, concluyó Méndez Mata.