A las puertas de que los diputados discutan en segundo debate la aprobación del proyecto sobre cannabis medicinal, el presidente de la República, Carlos Alvarado, afirmó que discutirá el plan junto con las autoridades del Ministerio de Salud antes de determinar si firma o no la propuesta.
La iniciativa legalizaría el uso del cannabis con fines terapéuticos, así como la producción del cáñamo con objetivos industriales.
“El Gobierno está a la espera de que se dé un segundo debate. A partir de ello, con las autoridades de Salud, vamos a revisar el texto final antes de emitir una decisión. Eso es lo que nos corresponderá hacer”, afirmó el mandatario.
La Asamblea Legislativa podría someter a votación final el proyecto de ley esta misma semana, luego de que el pasado viernes la Sala Constitucional remitió al Congreso el voto completo de la consulta de constitucionalidad.
Silvia Hernández, presidenta del Congreso, indicó que será voluntad de las fracciones políticas determinar qué día podrían efectuar la votación en segundo debate
Dicha iniciativa de ley fue aprobada en primer debate el 19 de octubre de 2021, con 33 votos a favor y 13 en contra. No obstante, la segunda discusión quedó suspendida por la consulta que interpusieron 10 diputados.
La consulta que plantearon esos legisladores, sin embargo, resultó inentendible para el Tribunal, pues la gestión no establecía las razones por las que consideraban que la iniciativa violenta la Constitución.
Los magistrados señalaron a los congresistas que “el problema principal de la consulta es que no se detiene a señalar individualmente” qué partes del proyecto de ley consultado contienen los vicios o roces que ellos afirman.
El plan impulsado por la diputada independiente Zoila Volio se centra en autorizar la producción de las plantas de cannabis, tanto las que tienen alto contenido de tetrahidrocannabinol (THC), para uso medicinal y terapéutico, como las que tienen bajo THC, como el cáñamo, de múltiples usos industriales.
El texto estaba en agenda de la Asamblea Legislativa desde mayo del 2019 y se dictaminó en la Comisión de Ambiente en noviembre del 2020. La idea de los legisladores es generar reactivación económica mediante la apertura de una nueva actividad productiva.
Para la producción de ambas plantas y sus derivados, los productores tendrán que registrarse ante el Estado y brindar amplia información a las autoridades sobre sus actividades. El Ministerio de Agricultura (MAG) tendrá a su cargo la regulación del mercado del cáñamo y el de Salud, el del cannabis para uso medicinal y terapéutico.
Salud, Agricultura y el Instituto Costarricense sobre Drogas (ICD) tendrán potestades de inspección y fiscalización periódicas sobre los productores y desarrolladores de derivados del cannabis y el cáñamo.
En la iniciativa, se autoriza la venta de materia prima de cannabis medicinal a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), así como a laboratorios autorizados para el desarrollo de los medicamentos necesarios.
Entre las últimas mociones que aprobaron los legisladores están la del liberacionista Roberto Thompson para autorizar que empresas relacionadas con este mercado se instalen en régimen de zonas francas, exclusivamente en los casos de alta tecnología e industrialización, no así las dedicadas al cultivo.
[ Todo sobre el proyecto de ley del cáñamo industrial y el cannabis medicinal en Costa Rica ]
El cannabis es una especie vegetal de la familia cannabácea, capaz de producir cannabinoides. El cannabis no psicoactivo se conoce como cáñamo por su bajo contenido de tetrahidrocannabinol (THC) y no tiene propiedades psicoactivas, pero sí múltiples posibilidades de aprovechamiento industrial, mientras que el psicoactivo tiene altos niveles de THC: la marihuana.
El proyecto permitirá que personas jurídicas, pero también físicas, tengan acceso a licencias para cultivo y producción de cannabis medicinal o sus derivados. Los congresistas se aseguraron de que un 40% de las licencias sean para medianos y pequeños productores, con el fin de abrir ese mercado a los emprendedores, además de inversionistas nacionales y extranjeros.
En cuanto al impuesto específico, las empresas de la industria del cannabis tendrán que pagar un tributo específico del 1% sobre las utilidades. Las firma que se alojen en zona franca no podrán evitar dicho impuesto.