La elección del 3 de abril registró la mayor cantidad de votos nulos y blancos en la historia de las segundas rondas electorales. Un total de 51.000 ciudadanos acudieron a las urnas, pero no votaron ni por Rodrigo Chaves, hoy presidente electo, ni por José María Figueres, excandidato del PLN.
Este número de votos blancos y nulos fue tan alto que duplicó la cifra de la segunda ronda del 2018, en la que ganó el actual mandatario, Carlos Alvarado, sobre el hoy diputado electo de Nueva República, Fabricio Alvarado. Asimismo, las cifras del 2022 estuvieron cerca de triplicar las de la segunda vuelta del 2014, que se disputó entre el expresidente Luis Guillermo Solís y el alcalde de San José, Johnny Araya.
En el 2002, cuando Abel Pacheco le ganó la Presidencia a Rolando Araya en el primer balotaje de la historia del país, se registraron 33.463 votos nulos o en blanco.
En términos porcentuales, este tipo de voto representó el 2,5% en la elección de Pacheco; 1% en la de Solís, 1,1% en la de Alvarado y 2,6% en la de Chaves.
Para Ronald Alfaro, politólogo y coordinador de las encuestas del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), el comportamiento de votos nulos y en blanco del pasado 3 de abril es una forma democrática de protesta contra la oferta de los candidatos presidenciales
“Es una forma de manifestar ese rechazo a esas candidaturas; prefirieron ir a votar y dejar en blanco o anular el voto que abstenerse; esto es de alguna forma la fuerza que tiene la cultura cívica nuestra, aun en el escenario en el que para mucha gente era muy difícil de procesar, la gente dice ‘sí voy a ir a votar y manifestar mi rechazo’”, expresó Alfaro.
El experto aseguró que, en la teoría, esto es una manifestación de cultura política, pues las personas que acuden a votar lo hacen conscientes de sus valores y compromisos cívicos, contrario a lo que sucede con los abstencionistas, que deciden protestar desistiendo de acudir a las urnas.
Un estudio universitario, previo a la segunda ronda, reveló que a la gente se le dificultaba encontrar aspectos positivos en Figueres y en Chaves. El abstencionismo fue de un 43,2% en el balotaje.
Lectura de los resultados
“El presidente electo tiene que leer muy bien estos resultados, de tal manera que no vaya a engañarse pensando que su respaldo es muy amplio, porque al mismo tiene un rechazo mayor”, comentó Ronald Alfaro. Explicó que más de 1,5 millones de personas se abstuvieron de votar; 908.000 apoyaron a Figueres y 51.000 invalidaron el sufragio. Estos tres grupos suman casi 2,5 millones de ciudadanos.
El aspirante del Partido Progreso Social Democrático (PPSD) ganó con poco más de un millón de votos.
Según explicó el politólogo, Chaves va a enfrentar una oposición importante, ya que en la primera ronda obtuvo un respaldo más bajo y, en la segunda, partidarios de otras agrupaciones le dieron su apoyo.
En el caso de Carlos Alvarado y el expresidente Luis Guillermo Solís, que obtuvieron mayores márgenes sobre sus contrincantes en segunda ronda, el apoyo se les erosionó en sus respectivos gobiernos, por lo que Alfaro considera que ese factor debe ser tomado en cuenta.
“Aquí hay un tema clave, que es que don Rodrigo y su gobierno tienen que saber leer muy bien ( estos datos); ellos no tiene un cheque en blanco porque hay una oposición política tanto en el Congreso, que es mayor, así como una opinión desde el punto de vista de la sociedad civil, hay un grupo importante de gente que no se matriculó con esta candidatura”, aseveró el dirigente del CIEP.
Por cantones del país
A diferencia del abstencionismo, el cual históricamente ha sido mayor en zonas rurales, el fenómeno de votos inválidos no tiene una comportamiento mayor en estas áreas en comparación con la gran área metropolitana.
Los cantones con los porcentajes más altos de sufragios blancos y nulos fueron Dota, Montes de Oca, Talamanca, Oreamuno, Turrialba, León Cortés Castro y el cantón central de Limón. Por otra parte, 35 cantones, entre los que se encuentran tanto rurales como metropolitanos, presentaron un porcentaje de participantes con votos inválidos superior a la media nacional.
Chaves pierde cantones con más votos inválidos
Si bien el presidente electo, Rodrigo Chaves, ganó en 53 de los 82 cantones del país, los municipios que perdió fueron los que presentaron las mayores tasas de votos inválidos. Este fue el caso de Dota, donde el 4% de los electores se inclinó por dejar inválida la papeleta presidencial este 3 de abril.
Lo mismo sucedió con Montes de Oca, Oreamuno, León Cortés Castro, Tarrazú, Santo Domingo, Cartago y San Pablo; todos son porcentajes que oscilaron entre el 3% y 4% y fueron ganados por el excandidato presidencial José María Figueres, del Partido Liberación Nacional (PLN).
Además, de los 29 cantones que el Partido Progreso Social Democrático (PPSD) perdió, 18 presentaron porcentajes de papeletas nulas y blancas superiores a la media nacional.