Pilar Cisneros, diputada y jefa de fracción del gobernante Partido Progreso Social Democrático (PPSD), afirmó en el plenario de la Asamblea Legislativa que la vacuna contra la covid-19 es experimental. Aunque se le consultó en cuál respaldo científico fundamentó sus declaraciones, a la fecha no ha dado respuesta.
La afirmación la hizo la tarde del lunes 16 de mayo. Ese día, en el marco de un discurso para defender las primeras acciones del Gobierno, la oficialista dijo que la administración del presidente de la República, Rodrigo Chaves, abrió una discusión seria sobre el uso de las mascarillas y “la conveniencia de mantener la obligatoriedad de una vacuna experimental contra la covid-19″.
No obstante, aunque Chaves dijo el 8 de mayo que había eliminado la obligatoriedad de la vacuna con un decreto, en realidad no lo hizo; carecía de un criterio técnico para ello. El decreto lo que hace es instar a los patronos públicos y privados a no sancionar con despido a quienes no se vacunen, acción que ha despertado dudas entre juristas.
En todo caso, luego de firmar el decreto, el presidente Chaves invitó a las personas a vacunarse y afirmó que él mismo lo hizo, sin recurrir al argumento de que la vacunación es experimental, alegato que sí utilizan los grupos antivacunas.
A la fecha, el 85% de la población en Costa Rica tiene al menos una vacuna contra la covid y el 80% tiene dos dosis. Además, ya se habilitó la inmunización en niños y la cuarta dosis se aplica a mayores de 50 años y mayores de 12 con problemas inmunes.
María Luisa Ávila, pediatra, infectóloga y exministra de salud, explicó que las vacunas utilizadas en el país han pasado por todas las etapas de investigación que se requieren, encontrándose actualmente en la fase cuatro, en la que se encuentran fármacos probados como la aspirina, por ejemplo.
“Lo que doña Pilar dice está mal, ella es una periodista que debería investigar más”, agregó Ávila, quien detalló paso a paso como las dosis suministradas a los costarricenses no son “experimentales”.
La Nación también solicitó a la viróloga Eugenia Corrales una reacción a lo dicho por Cisneros; sin embargo, esta indicó: “No me parece que tenga que dedicarle más de mi esfuerzo a esto”. Esta profesional ha explicado en muchas ocasiones la forma en que actúan estas vacunas.
Según explicó María Luisa Ávila, la primera parte se llama fase preclínica, en la que se realizan los ensayos de laboratorio con animales De esa etapa, muchas vacunas no pasan, ya que se debe tener certeza de que no hay efectos con la molécula; en caso de que estos se presenten, la investigación inmediatamente se detiene.
Ávila comentó que luego se entra a la segunda fase, la de ensayos clínicos controlados, la cual se compone de tres pasos. El primero consiste en la participación de voluntarios, para asegurarse de que la vacuna es segura en humanos; en el segundo paso se corrobora que la vacuna sea inmunogénica, que produzca inmunidad ante el estímulo.
Una vez superadas estas fases, se llega al paso tres. En este, se divide a un grupo de personas en dos. A la mitad se le suministran placebos o una sustancia inerte, y a la otra mitad se le pone la dosis, con el fin de analizar el nivel de inmunidad que produce la vacuna.
La especialista explicó que, por último, se entra en la fase cuatro, la etapa posmercadeo, en la que la vacuna se mantiene hasta que se saque del mercado, pues ya es un fármaco seguro.
En esta etapa se encuentran las vacunas contra la covid-19 como las de Pfizer, AstraZeneca, aplicadas en Costa Rica.
“Las vacunas que en este momento se están utilizando en Costa Rica son las vacunas que ya pasaron por todas esas fases; entonces, ya no se le puede considerar una vacuna experimental. Que los tiempos se acortaron, sí, es cierto, pero estamos ante una pandemia; no podemos esperar todo el tiempo del mundo.
“Esta es la primera vez en el mundo que se dedicaron recursos humanos, recursos económicos, que todo el mundo se puso de acuerdo para lograr esta vacuna, pero esto no significa que sean experimentales”, comentó la exministra de Salud.
La infectóloga explicó que, para las vacuna de Pfizer y AstraZeneca, se utilizó la tecnología ARN mensajero y adenovirus como vector viral ,respectivamente, plataformas que se empezaron a generar en los años 60. Sobre estas se hicieron las pruebas y dieron resultados.
Además, comentó que ya había adelantos en el tema del SARS, virus que el mundo enfrentó hace más de una década, por lo que se tenía conocimientos en la materia, ya que se para combatirlo se creó una vacuna.
La Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no solo ha autorizado las vacunas contra la covid-19 disponibles en el país, sino que, de forma continua, desde diciembre del 2020, ha actualizado las formas de uso autorizadas; gracias a esto, ya se cuenta con vacunación infantil.
Incluso, el pasado 17 de mayo, la FDA informó de que, en Estados Unidos, los niños entre los 5 y los 11 años podrían recibir pronto una tercera dosis de refuerzo contra covid-19 de las compañías Pfizer y BioNTech, gracias a la seguridad de estas.
**Luego de publicar esta nota la congresista oficialista indicó que sus declaraciones en el plenario estaban respaldadas por una publicación de la FDA, realizada en diciembre del 2020.
La legisladora argumentó que en ese momento la FDA autorizó el uso de emergencia de una vacuna con beneficios y riesgos que a esa fecha se desconocían.