El Congreso cedió a las presiones del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC) y aplazó la votación de la reforma al reglamento legislativo hasta el próximo lunes.
Este miércoles, día en que estaba previsto votar la reforma, los socialcristianos amenazaron con oponerse a la iniciativa en represalia por la decisión del Poder Ejecutivo de desconvocar los proyectos para regular el uso del plástico.
La alternativa que presentó el PUSC durante la tarde, a través de una moción, fue suspender el trámite para negociar sus condiciones con el Gobierno durante el fin de semana.
Ante el riesgo de que se cayera el acuerdo para tramitar el nuevo reglamento, las fracciones legislativas aprobaron por unanimidad posponer la votación.
“No es una rabieta”, aseveró Erwen Masís, jefe de fracción de la Unidad, quien agradeció que el plenario aplazara la votación hasta el lunes.
El líder de los socialcristianos aseguró que durante los siguientes días trabajará en delimitar las condiciones que pondrá su partido para votar a favor de la reforma.
Masís sostuvo que lo que más pesará en la decisión de su bancada con respecto a la reforma reglamentaria será si consigue o no un compromiso del Poder Ejecutivo sobre reactivación de la economía.
“El tema es más allá del plástico. Plástico es solamente la gota que derrama el vaso, aquí hay una serie de proyectos presentados al Ejecutivo, está la reactivación económica, está el desencanto que produce el 12% de desempleo, están proyectos visualizados en cada una de las provincias y no entendemos por qué. Desafortunadamente, las cosas caen hoy y pegan con el reglamento”, declaró Masís.
Trámite más ágil de leyes
La reforma al reglamento legislativo fue impulsada mediante un acuerdo de varias fracciones, incluida la del PUSC, para agilizar los trámites legislativos, en especial los relativos a proyectos de ley e investigaciones.
Dicha propuesta incluye cambios en los plazos para tramitar leyes, en las disposiciones para el uso de la palabra, en la publicidad de las votaciones, en el trámite de los informes de investigaciones y en el procedimiento de vía rápida.
La iniciativa ya está lista para votación. Debido a ello, el pasado martes las fracciones se pusieron de acuerdo para extender la sesión de este miércoles hasta que se aprobara el texto.
No obstante, en el transcurso de la jornada, el bloque de diputados independientes se sumó al PUSC y pidió aplazar el trámite final. La legisladora Ivonne Acuña, integrante de ese bloque, alegó que necesitan tiempo para analizar la iniciativa.
La legisladora afirmó que su postura no tiene relación con el reclamo de los socialcristianos con respeto a la desconvocatoria de los planes para reglar el uso del plástico.
No obstante, Acuña calificó de “desafortunada” la decisión del Ejecutivo de hacer cambios en la convocatoria de proyectos un día antes de la votación de la reforma al reglamento.
Por su parte, Carlos Avendaño, jefe de Restauración Nacional, manifestó que su bancada apoyó la idea de posponer la votación del reglamento como un gesto de solidaridad con el PUSC.
No obstante, aclaró que su bancada sí votará a favor del nuevo reglamento, sin condicionar sus votos.
PLN al margen
Carlos Ricardo Benavides, jefe de fracción del Partido Liberación Nacional (PLN), indicó que su agrupación apoyó el aplazamiento de la votación tomando en cuenta el hecho de que para aprobar la reforma se requieren 38 votos.
Sin embargo, enfatizó en que su partido está listo para pronunciarse a favor de la renovación del reglamento, y que no intervendrá de ninguna forma en las negociaciones de los socialcristianos.
“A Liberación Nacional le parece que este tema no tiene nada que ver con negociaciones con nadie que sea externo a la Asamblea Legislativa. El reglamento de la Asamblea Legislativa es un proyecto de esta Asamblea Legislativa, ni siquiera es convocable o desconvocable por el Poder Ejecutivo y los temas que tenga que ver la fracción de la Unidad con el Poder Ejecutivo es un tema que ellos tendrán que atender y que poco nos atañe”, aseveró Benavides.
Mientras tanto, Carolina Hidalgo, presidenta del Congreso, pidió coherencia al PUSC, por ser uno de los partidos que participó en el acuerdo legislativo que impulsó la reforma reglamentaria.
“Creo que la discusión siempre tiene que ser sobre el fondo de los temas y no poner en juego o en riesgo una reforma de este nivel. Por supuesto, hay ajustes y mejoras en los procesos de diálogos paralelos, pero no deberían condicionar una reforma tan trascendental como esta”, manifestó la jerarca.