Para la expresidenta Laura Chinchilla, el primer gesto que debe hacer el próximo mandatario de Costa Rica es un "llamado a la unidad" en el país.
Este fue uno de los pedidos que hizo la exjefa de Gobierno (2010-14) luego de ejercer su voto, este domingo a las 9:45 a. m., en la escuela Joaquín García Monge, en Desamparados.
"Tengo que decirles que en ambos candidatos encontré condiciones muy favorables, obviamente ambos tenían sus faltantes. Me parece que ambos crecieron durante el proceso electoral; tuvieron humildad para reconocer que necesitaban fortalecer sus respectivos equipos, llamaron a gente de distintos partidos políticos a colaborar.
"Ojalá que no sea una pose de campaña y de nuevo insisto que los primeros gestos que mande el candidato ganador, cualquiera que sea, vayan en la dirección correcta, es decir, en ese llamado en esa unidad", aseveró Chinchilla.
La exmandataria no reveló a quién apoyó, pero agregó que el nuevo presidente deberá tratar con urgencia el "serio problema que deja este gobierno", como lo es déficit fiscal.
Por su parte, el exgobernante Rafael Ángel Calderón (1990-1994) señaló que el nuevo presidente debe ser una persona que busque la unidad nacional y, en ese sentido, consideró que tanto Fabricio Alvarado, del Partido Restauración Nacional (PRN), como Carlos Alvarado, del Partido Acción Ciudadana (PAC), lo están haciendo.
"(Buscar la unidad nacional) No se puede hacer solo. Cuando yo gané las elecciones tenía 30 diputados apoyándome y solo un partido político en frente y, sin embargo, necesité hablar con él permanentemente y llegar a acuerdos porque el país es de todos.
"El que gane va a necesitar mucho de los demás, buscar una unidad nacional y tomar decisiones cuanto antes", expresó Calderón luego de emitir su voto, a las 8:30 a. m., en la Escuela Josefita Jurado, en Curridabat.
El expresidente, quien mantuvo en reserva su voto, llegó acompañado de su esposa Gloria Bejarano.
Calderón, además, dijo que el nuevo dueño de la banda presidencial deberá enfocarse en tres temas importantes para el país: el déficit fiscal, la educación y tomar decisiones en cuanto al tema de seguridad social.
Para él, la religión y el matrimonio entre parejas del mismo sexo no debería dividir al país. "Que cada uno piense lo que le parezca, eso no es el gran problema nacional. Como lo dije antes, el problema nacional es el déficit fiscal, la educación y seguridad social", aseveró.
Mientras tanto, el exmandatario Miguel Ángel Rodríguez (1998-2002) sostuvo que los retos del próximo presidente son "unir al país, dejar de lado todos los extremismos y trabajar por una unión del país".
Rodríguez votó a eso de las 10:20 a. m. en la escuela Yanuario Quesada, en San Rafael de Escazú. Tampoco reveló a quien apoyó.
“El reto del presidente es unir al país, es dejar de lado todos los extremismos y trabajar por una unión del país, que desdichadamente no logramos y que yo aspiraba para esta segunda ronda; que hubiera una alianza con mayoría parlamentaria de alguno de los dos candidatos que lograra encauzar el país en una dirección”, dijo.
A Rodríguez lo acompañaron su esposa, Lorena Clare, y su nieto, Sebastián Rodríguez, quien estudia en el extranjero y vino a emitir el sufragio por primera vez.
Rodríguez dijo sentirse muy dolido al ver la forma como los electores, muchos de su partido, han utilizado la campaña electoral para agredirse en redes sociales.
“Tenemos que recordar que somos socialcristianos, que tenemos una obligación con el país. Que este país, gracias al socialcristianismo, ha tenido avances sumamente importantes, que tenemos que buscar el centro, la moderación y la tolerancia, que los partidos de centro son muy importantes y que hay que volver a la casa”, concluyó.
El dolor también embargó el expresidente José María Figueres Olsen (1994-1998), quien hasta lloró por el rumbo que ha tomado la campaña electoral y la manera en que, según él, la familia costarricense se ha desgarrado.
Figueres anunció que su voto fue para el candidato de Acción Ciudadana, al considerar que “es la persona que puede reunir un equipo de diferentes partidos políticos para sacar adelante a este país”.
Por su parte, Abel Pacheco (2002-2016), acudió a la Escuela Carlos Sanabria, de Pavas, y confirmó haber votado en blanco.
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"Como yo no pertenezco a ninguno de estos dos partidos, como veo mucha hostilidad entre ambos bandos, voy a votar en blanco para así actuar de puente entre uno y otro. Es decir voy a votar por Costa Rica", manifestó.
Pacheco recalcó que observa mucha obstilidad entre ambos bandos y su deseo es actuar de puente entre el PAC y el PRN.
“Cuando el TLC (tratado de libre comercio) estuvimos igual, con odio. Yo llamé a un referéndum para evitar que la gente se matara. Ahora hago lo que puedo hacer para evitar la violencia”, recalcó el socialcristiano.
El exmandatario insistió que al final de las elecciones "seguiremos siendo hermaniticos".
Pacheco acudió, a las 12:30 p.m., al centro de votación acompañado de tres de sus nietos.
Por otra parte, Gonzalo Ramírez, presidente de la Asamblea Legislativa, emitió su sufragio en el mismo recinto que el expresidente Pacheco, pero a las 10:30 a.m.
El diputado confirmó que su apoyo fue al candidato de Restauración Nacional.
“Fabricio (Alvarado) es la persona adecuada para crear un gobierno de unidad nacional”, enfatizó el legislador.