Seis empresas constructoras habrían financiado la fiesta de fin de año de los funcionarios del Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) en el 2019.
Para ello, pusieron ¢1,2 millones en efectivo, 10 botellas de licor y 70 kilos de carne y chorizo.
Así consta en el expediente judicial del Caso Cochinilla, sobre presunta corrupción en obras viales.
Según señala el informe, la actividad se celebró el 28 de noviembre en el centro de recreo del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), en Coronado, San José.
El documento detalla que las empresas donantes habrían sido MECO, Hermanos Bustamante, supervisora DICOOC, constructora FCC, Administradores Viales Cacisa y Also Frutales.
Conforme al expediente, Carlos Solís Murillo, gerente financiero del Conavi, fue quien acordó recibir las dádivas, “faltando a su deber de probidad en la función pública” y “actuando conjuntamente” con los personeros de las firmas constructoras.
El documento indica que, entre el 25 y el 29 de noviembre del 2019 –incluso el día de la fiesta– el alto funcionario aceptó recibir las regalías.
Lo anterior ocurrió mientras, en forma simultánea, facturas de dichas empresas se encontraban en proceso de cobro en el departamento financiero del Conavi.
A cambio de las dádivas, añade la documentación, Carlos Solís Murillo prometió darles un “trato preferencial y expedito” a las facturas de dichas firmas.
Con esa gestión, las constructoras se aseguraban de que sus trabajos, por concepto de obra pública, fueran cancelados a tiempo por el Conavi, evitando las demoras propias de la contratación administrativa.
Así pagaron la fiesta
El expediente del caso Cochinilla señala que la empresa que más dinero aportó para financiar el agasajo fue MECO, con ¢600.000.
Además, indica que DICOOC, Constructora Hermanos Bustamante y Constructora FCC contribuyeron con ¢200.000 cada una.
En el caso de MECO, el informe detalla que Carlos Solís Murillo se puso de acuerdo con Tobías Arce Alpízar, funcionario de esa firma constructora, para que Abel González Carballo, gerente de operaciones de la misma compañía, le girara el dinero.
El acuerdo se llevó a cabo entre el 25 y el 29 de noviembre de 2019.
Posteriormente, agrega el expediente, vinieron las donaciones de supervisora DICOOC, Constructora Hermanos Bustamante y Empresa Constructora FCC.
Las tres diligencias fueron realizadas el mismo 29 de noviembre.
El documento expone que, en complicidad con Tobías Arce Alpízar (de MECO), el gerente financiero del Conavi recibió el dinero por parte de Alister Alfonso Cervantes Morales, empleado de DICOOC.
Por otra parte, señala que para el acuerdo con Constructora Hermanos Bustamante, el gerente financiero del Conavi no necesitó intermediarios y que la negociación la sostuvo con Juan Carlos Bustamante Castillo, personero de dicha firma.
En tanto, sostiene la dádiva de la Empresa Constructora FCC fue entregada por Jefrey Ramírez Chaves, empleado de esa compañía.
El patrocinio por parte de los empresarios cubrió hasta la comida y los licores, negociaciones que tuvieron lugar entre el 28 y el 29 de noviembre, detalla el informe.
Por ejemplo, detalla que la empresa de administradores viales Cacisa puso una serie de carnes (de res, pollo, cerdo), así como salchichón, chorizo y tortillas.
Según destaca el expediente judicial, Carlos Solís Murillo, “abusando de su cargo como gerente financiero de Conavi, indujo a Mario Antonio Ocampo Rojas (personero de la empresa de administradores viales Cacisa) a dar una dádiva consistente en 20 kilos de carne de res, 10 kilos de carne de cerdo, 20 kilos de carne de pollo, 10 kilos de salchichón, 10 kilos de chorizo y 50 paquetes de tortillas para ser consumidos por él y otros funcionarios de Conavi en la fiesta privada”.
También apunta que la cuota de los licores estuvo a cargo de la compañía Also Frutales, a la cual Solís Murillo le solicitó 10 botellas de diferentes licores para amenizar la fiesta de fin de año de los empleados del Conavi.