Con la presentación, ayer, de los argumentos contra Nicaragua por la invasión a isla Calero, al país solo le queda presentarse ante los jueces de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, Holanda, para finalizar el proceso por este juicio internacional que se inició en el 2011.
El embajador Sergio Ugalde presentó dos legajos ayer ante la Secretaría de la CIJ: uno por la invasión de Calero, y el otro por la demanda que Nicaragua entabló contra Costa Rica por la construcción de la trocha.
Para la tercera semana de abril y la primera semana de mayo, el Gobierno de Costa Rica está convocado para la vista oral ante los jueces, lo que cerraría el proceso, al menos en lo que a este caso se refiere. De allí en adelante, el futuro del caso quedará en manos de los jueces.
El canciller Manuel González afirmó que se le ha dado continuidad al trabajo iniciado poco más de cuatro años atrás, manifestó seguridad en la presentación de las pruebas y sostuvo que la argumentación es sólida.
La presentación del legajo es clave en la última etapa de un proceso que entra ya en su quinto año, luego de que el gobierno de Laura Chinchilla denunciara al Estado nicaragüense de violar la soberanía costarricense en la isla Calero, en el cantón de Pococí, en el Caribe norte del país.
En esa ocasión, el Gobierno llevó el caso ante la CIJ luego de acudir a las instancias regionales, como la Organización de Estados Americanos (OEA).
Al mismo tiempo, Costa Rica inició las obras de la trocha fronteriza, que se desarrollaron en el 2011, como una medida de seguridad ante las amenazas a la soberanía nacional provenientes de Nicaragua.
El caso por la invasión de Calero se frenó parcialmente luego de que la Corte admitiera una demanda de Nicaragua del 2012, ya que el gobierno de Daniel Ortega se quejó de supuestos daños ambientales al río San Juan provocados por la construcción de la trocha fronteriza.
En cuanto a este punto, Costa Rica defiende su legitimidad para construir el camino, ante los alegatos de Nicaragua de que la vía genera daños en perjuicio del San Juan.
Por el contrario, el gobierno de Luis Guillermo Solís rechaza la acusación, “y considera que la presentación de ese caso por parte de Managua es una maniobra para minimizar sus acciones en relación con la invasión de territorio costarricense, perpetrada por tropas de Nicaragua a finales del año 2010”, apunta un comunicado de Cancillería emitido ayer.
Conflicto vigente. El conflicto con Nicaragua se ha mantenido vigente en estos años, en medio de tensiones.
En lo que va de los ocho meses del gobierno de Solís, Nicaragua ha anunciado la entrada de 15 dragas más al río San Juan.
Además, reportes de la Fuerza Pública en el lugar dieron cuenta de corta de árboles en Calero pagados por el Gobierno de Nicaragua, lo que ha servido para mantener los ánimos crispados.