La Contraloría General de la República verificó que, en el 2020, el crecimiento en el costo de los salarios del Gobierno Central se desacelerará de forma notoria, con respeto a los años anteriores.
Según los datos que presentó este miércoles la contralora Marta Acosta a los diputados, la partida de remuneraciones en el proyecto de Ley de Presupuesto 2020 crece en un 1,1% con respecto al presupuesto 2019 actualizado.
En años anteriores, el aumento fue significativamente mayor. Según el informe técnico sobre el proyecto de presupuesto elaborado por el ente contralor, las remuneraciones tuvieron un crecimiento promedio del 17,0% en el periodo 1996-2007, de 23,7% en los años 2008-2010 y de 7,4% desde el 2011 hasta el 2018.
El próximo año, el Estado destinará ¢2,7 billones al pago de las remuneraciones de los funcionarios de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial, así como a los del Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), la Defensoría de los Habitantes y la Contraloría. De ese monto, un 39% corresponde a salarios base y un 42,6% a incentivos salariales.
Según explicó Acosta a los integrantes de la Comisión de Asuntos Hacendarios, el crecimiento desacelerado para el próximo año se da en ambos rubros: los sueldos básicos aumentan en un 1,5%, y los pluses en 0,9%.
“Variaciones que son significativamente pequeñas frente a las alcanzadas en años anteriores”, notó la contralora en el Congreso.
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“La desaceleración en la partida de remuneraciones no es solo de este año, viene desde hace algunos años, pero definitivamente para este año a propósito de la reforma (tributaria) va a ser un poco más notoria”, señaló Acosta a La Nación.
La contralora general recordó que la partida de remuneraciones llegó a consumir un 29% del presupuesto nacional, y ahora representa un 25,4% de los ¢10,5 billones a los que asciende el proyecto de presupuesto para 2020, "lo cual lo veo positivo, respecto al saneamiento de las finanzas”, dijo la jerarca.
En su exposición, Acosta dijo que la relación entre incentivos y remuneraciones básicas también disminuye en el borrador de presupuesto, pues se asignan ¢656 colones menos de pluses por cada ¢100.000 de sueldos base.
“Esto puede sonar muy poquito, pero en realidad es importante”, acotó la contralora.
El monto total del plan de gastos para 2020, según la Contraloría, equivale a un 27,2% del producto interno bruto (PIB) y decrece en un 5,9% con respecto al presupuesto vigente.
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14 instituciones gastarán menos en salarios
Según la revisión de la CGR, en el 2020, un total de 14 instituciones bajarían su gasto en salarios con respecto al 2019.
Se trata de los ministerios de Hacienda, Obras Públicas y Transportes, Salud, Agricultura, Trabajo, Ambiente, Presidencia, Planificación, Ciencia, Comercio Exterior y Vivienda.
También lo harían la Asamblea Legislativa, el TSE y la Defensoría.
El mayor recorte lo hará el MOPT, cuya erogación disminuiría en un 4,9% luego de eliminar 21 plazas.
Por otra parte, el Ministerio de Educación Pública (MEP) y el Poder Judicial, las dos instituciones que concentran el 74% del presupuesto de salarios, aumentarían el gasto.
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El MEP lo hará en un 0,8%, principalmente por la incorporación de 525 plazas docentes y 318 plazas por conversión de cantidad de lecciones a puestos, mientras que el crecimiento en el Poder Judicial será de un 1,4% (¢5.354 millones), debido a que mantendrá el cálculo de los incentivos salariales en forma porcentual y no nominal, como lo dispone la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas.
Las plazas asignadas al Gobierno Central en el 2020, mientras tanto, crecerían en un 0,5%. Los únicos puestos que se crearían serían los 843 solicitados en el MEP, pero su impacto presupuestario lo mitigarán las plazas 158 que se suprimirían de otras instituciones.