Los diputados aprobaron, en primer debate, este martes, un préstamo por $31 millones cuyos objetivos son la protección, restauración, mejoras y gestión del Teatro Nacional de Costa Rica.
La iniciativa contó con el apoyo de 33 legisladores, luego de meses de fuertes polémicas en torno al uso que se le daría a ese dinero, principalmente porque muchos congresistas lanzaron dudas sobre la necesidad de realizar obras en edificaciones aledañas bajo la administración del Teatro.
No obstante, el futuro del plan es incierto, porque la votación en segundo debate requiere de 38 votos y el apoyo para alcanzar esa votación calificada no está para nada segura.
La discusión de primer debate se desarrolló durante cuatro horas en las que prácticamente todas las fracciones pusieron sobre la mesa sus argumentos a favor y en contra.
A favor del plan votaron 12 legisladores del PLN, 10 del PAC, 5 del bloque independiente Nueva República, 3 del Partido Integración Nacional (PIN), 2 del Partido Republicano Social Cristiano (PRSC) y uno del Frente Amplio.
En contra, votaron siete del PUSC y seis de Restauración Nacional, así como una liberacionista.
“Una serie de obras adicionales que han desvirtuado el objetivo”
“Mi oposición no es contra la remodelación, sino contra el crédito mismo. Se concibió como una herramienta para prevenir incendios, pero se fue pensando en una serie de obras adicionales que han desvirtuado el objetivo del mismo y han generado una serie de objeciones a su alrededor”, dijo Mileidy Alvarado, de Restauración Nacional.
No se tiene un criterio que determine si la declaración de patrimonio queda comprometido o no con estas obras, añadió la legisladora restauracionista. Adujo que la administración tiene deficiencias con respecto al control interno.
Alvarado también indicó que las penalizaciones por incumplimiento de la ejecución del plan son “muy onerosas”.
Enrique Sánchez, del PAC, enfatizó que si no se realizan obras paralelas que se derivan del préstamo, el Teatro Nacional seguirá en riesgo. “El Teatro seguirá siendo una bodega y sede de oficinas, pero no es para eso", dijo.
En Liberación Nacional, el voto no fue unánime. Wagner Jiménez dijo que él está convencido de que el arte y la cultura tienen poco precio, pero muchísimo valor.
“Apoyo la permanencia y continuidad del nuevo símbolo nacional, decretado en el 2016, que es el Teatro Nacional”, dijo Jiménez.
Agregó que si existe la oportunidad de aprobar el préstamo, se garantiza la transmisión cultural para las próximas generaciones. “Yo no deseo ser responsable para garantizarle una intervención integral al teatro”, dijo.
Jiménez agregó que, con esos $31 millones, no se podría construir un nuevo Teatro Nacional si la edificación actual se llegase a quemar en algún momento. “El desarrollo nacional no solo se construye con más puentes y carreteras, sino también con más teatros”, añadió.
Aunque finalmente se logró la aprobación en primer debate, el panorama no es nada prometedor para la segunda votación, pues como se trata de un crédito internacional, para el segundo debate se requieren 38 votos.
La directora del Teatro Nacional, Karina Salguero, se manifestó satisfecha con la decisión de los parlamentarios.
“Este es el resultado de un país que hace 122 años decidió poner un teatro para generar alrededor una comunidad, una ciudad, que creciera, con una economía activa, que generara empleos, pero que también formara”, dijo Salguero.
Añadió que el Teatro Nacional representa todo el pensamiento que se ha producido. Comentó que los legisladores tomaron la decisión correcta, “no solo reafirman la historia, sino que reiteran que hacia delante hay más de 100 años de historia por contar”.
“Hay transformación, esto es una actualización, quiere decir que se dinamiza otra vez una economía que ha estado estancada y que merecía un respiro. Esto es una oportunidad”, manifestó.
El plan integral para la inversión del crédito consta de tres pilares: protección y restauración del Teatro ($16 millones); sostenibilidad, mejoras a la edificación y al centro cultural ($10 millones); y gestión ($4,6 millones).
Los proyectos específicos contemplados dentro del programa son un sistema de protección activa contra incendios, otro sistema de protección activa-pasiva contra incendios, la sustitución de la instalación de la instalación eléctrica y sus componentes, la actualización tecnológica del escenario, trabajos en la concha acústica y en la bóveda subterránea.
Por otra parte, se realizarán obras de climatización en la sala principal del Teatro, la sustitución y fumigación de la madera, así como el cambio de alfombras y tapices, la restauración de las pinturas decorativas y la construcción de un edificio en el terreno anexo al Teatro.
Esa edificación albergará, en el mismo lugar, la sala teatral Vargas Calvo, el taller de conservación, las oficinas administrativas, la proveeduría institucional, las bodegas del material escénico y un salón de ensayos.
El terreno se ubica detrás del edificio del Teatro Nacional, en la esquina de la avenida segunda con la calle 5.
Específicamente, el préstamo financia el Programa Integral de Seguridad y Conservación del Monumento Histórico Teatro Nacional de Costa Rica, con dinero proveniente del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
El monto total es de $31.329.706, con una tasa Libor a seis meses más 2,9% a margen fijo. Los desembolsos del crédito se darán durante tres años contados a partir de la fecha del primer desembolso, con un periodo de gracia de esos mismos tres años.
El plazo para la amortización del crédito será de 17 años.