Varios diputados de la Comisión de Nombramientos de la Asamblea Legislativa cambiaron radicalmente las calificaciones que habían emitido inicialmente sobre los candidatos al cargo de subcontralor de la República y, con ello, modificaron totalmente el orden en que aparecían ranqueados los aspirantes.

El cambio se produjo luego de que el foro aprobó repetir las calificaciones de los siete congresistas, sobre las audiencias de los postulantes, por un reclamo del jefe de la Unidad Social Cristiana (PUSC), Rodolfo Peña.

El vocero socialcristiano alegó un supuesto error de forma en el plazo fijado para presentar las primeras calificaciones, que le generó a él haber presentado su boleta con las calificaciones a destiempo. Por su presión, los demás legisladores accedieron a repetir la presentación de las boletas.

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Entonces, varios de los miembros de la comisión dieron un giro de 180 grados en las calificaciones y, básicamente, utilizaron las notas más bajas posibles (40, 50, 60) para candidatos que antes habían calificado mejor.

Las nuevas notas pusieron a la cabeza al exdiputado del PUSC Bernal Aragón Barquero (1994-1998) y bajaron en el ránking al exasesor liberacionista Sergio Ramírez, la exdiputada del PLN Paulina Ramírez y la actual subcontralora Silvia Solís.

En la primera votación, sin las notas de Peña a las entrevistas, la lista estaba encabezada por Sergio Ramírez, con una nota de 94,8; Silvia Solís, con un 90,9, y Paulina Ramírez, con 90,6.

En cuarto puesto estaba, originalmente, Aragón, con un 90,6, y de quinto lugar había quedado Katherine Berdugo, con un 89,8.

En la tabla de calificaciones original, impugnada por Rodolfo Peña y luego anulada por acuerdo de los miembros del foro, las notas más bajas eran 6,5 y, de ahí para arriba, todos los candidatos habían sido calificados según las afinidades de los diputados respecto a sus entrevistas.

No obstante, cuando se repitió el proceso, hubo tres diputados que le dieron a Sergio y Paulina Ramírez notas de 40, y a Silvia Solís le dieron un 50, mientras que a Bernal Aragón le dieron 100, y a Katherine Berdugo la calificaron con 90, 60 y 90.

Con esa modificación sustancial de las calificaciones, Aragón tomó la cabeza de la lista de recomendados, con una nota de 91,54, seguido de Ramírez, con 90,57, y Berdugo, con 90,29.

En tanto, la actual subcontralora y Paulina Ramírez, descendieron al cuarto y quinto puestos de la lista, con 87,24 y 86,69, respectivamente. Ambas quedaron fuera de la terna que Nombramientos recomendó al plenario, el lunes de la semana pasada.

Aunque otros diputados también cambiaron sus calificaciones generales sobre los aspirantes a la subcontraloría, fue más considerable el impacto de tres diputados en particular.

No obstante, debido al velo de secretismo con que la Comisión de Nombramientos toma sus decisiones, resulta imposible saber a ciencia cierta quiénes son los que aplicaron las notas más bajas a la mayoría de aspirantes.

Otros postulantes que recibieron bajas notas de sus entrevistas fueron Luis Orlando Araya Carranza, a quienes los tres legisladores le dieron 40, y lo mismo sucedió con Alfredo Bruno Muñoz.

Mientras tanto, los mismos congresistas les dieron un 50 a Fiorella Rojas Balletero y a Mauricio Gómez Franceschi; a David Salas Aguilar, Jeannine Herrera Arias y Luis Gerardo Fallas Acosta, les dieron un 60.

La terna para subcontralor

Luego de hacerse ese cambio en las calificaciones, los diputados votaron el lunes de la semana pasada para enviar la terna recomendada al plenario, con los nombres de Bernal Aragón, Sergio Ramírez y Katherine Berdugo.

Aunque el plenario no está obligado a nombrar el subcontralor a partir de esa terna, es poco frecuente que se aparte del criterio recomendado por Nombramientos.

En caso de que lo haga, podría optar por escoger alguno de los nombres de los otros postulantes al puesto.

¿Por qué cambiaron la votación?

El liberacionista Luis Fernando Chacón indicó que tanto él como el presidente de la comisión, Jorge Fonseca, mantuvieron sus votaciones exactamente iguales.

“El reclamo de Peña era parcialmente cierto, porque si había una hora, si no la entregó, ya no lo hizo. El problema fue que al final, se acordó aprobarle y se abrió para que se reevaluara”, dijo.

Chacón reconoció que hubo cuatro personas que cambiaron la votación radicalmente y cambió las cinco primeras posiciones.

“Si hubo un acuerdo político, Liberación estuvo fuera de él, y estoy seguro que Enrique Sánchez también. Creo que hubo un acercamiento entre la Unidad, Otto Roberto Vargas y los dos de Restauración”, agregó.

Añadió que se valía proteger el secreto de la votación de Peña, pero que no había elementos adicionales para cambiar la votación de los demás.

Fonseca, presidente del foro, dijo que pudo haber influido mucho la opinión del diputado Rodolfo Peña, que es el defensor de Bernal Aragón (exdiputado del PUSC) y si los costarricenses valoran las votaciones, hay tres legisladores que variaron mucho la votación y eso llevó a Aragón al primer lugar.

“Tal vez el convencimiento de don Rodolfo influyó”, dijo Fonseca. Añadió que su voto se dio igual, porque “para eso hicimos una entrevista y en nosotros no varió nada de un día para otro”.

Floria Segreda negó que ella estuviera entre quienes cambiaron su opinión y dijo que, supone, que como se permitía la recalificación por el reclamo de Peña, quizás decidieron cambiar de idea.

“Yo, al menos, conmigo no. No puedo hablar por los demás. Conmigo, personalmente, no hubo ningún convenio, no estuve en ese grupo”, alegó Segreda, cuando se le consultó si habría algún acuerdo político entre quienes decidieron modificar sus notas.

Se intentó conversar con Carlos Avendaño, también de Restauración, y con Enrique Sánchez, del Partido Acción Ciudadana (PAC), pero no respondieron las llamadas.