19 diputados, de siete partidos políticos, le enviaron al papa Francisco una carta de tres párrafos, donde le solicitan intervenir ante el presidente, Luis Guillermo Solís, en contra de cualquier acción para legalizar el aborto en Costa Rica.
En la nota, los legisladores le informan al pontífice que, en nuestro país, el Código Penal fija situaciones muy particulares para permitir el aborto terapéutico (o impune, como lo describen ellos), en caso de peligro para la vida o salud de la madre.
Sin embargo, estos congresistas sospechan que hay indicios de que esas excepciones legales se podrían aprovechar para "ampliar y permitir el aborto en otros supuestos".
La carta llegaría a manos de Francisco cuando se la entregue la liberacionista Paulina Ramírez, quien viajó a Italia para acompañar al presidente Solís en su visita a la Santa Sede.
La misiva tiene las firmas de Aracelli Segura, Olivier Jiménez, Rolando González, Marta Arauz, Michael Arce, Juan Marín y Paulina Ramírez, del Partido Liberación Nacional (PLN); William Alvarado, Luis Vásquez, Jorge Rodríguez, Johnny Leiva y Gerardo Vargas Rojas, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC); Fabricio Alvarado de Restauración Nacional, Víctor Morales Zapata del Partido Acción Ciudadana (PAC), José Alberto Alfaro del Movimiento Libertario, Mario Redondo de Alianza Demócrata Cristiana (ADC) y Óscar López del Partido Accesibilidad Sin Exclusión (PASE).
"Acudimos a Su Santidad con el fin de solicitarle la interposición de sus buenos oficios para que extienda un atento exhorto al presidente de la República (...) para tener su compromiso público y probado a que se abstendrá de cualquier política de gobierno tendiente a legalizar el aborto", reza la nota para Francisco.
Los legisladores refuerzan su petición en que Solís se ha manifestado públicamente como un católico profeso y por ello piden al Papa mencionarle la posición de la Iglesia Católica en cuanto al aborto.
Las únicas agrupaciones políticas que no firmaron, de las nueve representadas en el Congreso, son el Frente Amplio y Renovación Costarricense, aunque esta última bancada habría quedado fuera por un asunto de premura en el envío de la carta.