Diputados de diversos partidos de oposición fustigaron este jueves a la presidenta ejecutiva de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), Marta Esquivel, quien rehúsa devolver los pagos recibidos de más en su salario luego de que la Contraloría General de la República (CGR) determinó que su sueldo supera el tope de ley.
El 19 de diciembre, la Contraloría señaló que la CCSS pagó a Esquivel un salario de ¢7,1 millones mensuales desde que fue nombrada, el 20 de setiembre de 2022. Sin embargo, la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas ordena que el salario total de los servidores públicos no supere el equivalente a 20 salarios base de la categoría más baja de la escala de sueldos, es decir, ¢5,5 millones mensuales.
Esto significa que la jerarca de la Caja gana ¢1.593.848 mensuales por encima del tope establecido por la ley. “La infracción a esta normativa legal supone una afectación a la Hacienda Pública, toda vez que implica una erogación de fondos públicos superior a la establecida por el legislador”, dijo la Contraloría.
La diputada Vanessa Castro, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), criticó que Esquivel presentara una consulta al Ministerio de Planificación (Mideplán) para que se pronuncie sobre su salario. La congresista recalcó que dicho ministerio no tiene las mismas atribuciones ni funciones que el órgano contralor.
“En gobiernos pasados, aquí hubiera sido una revolución, pero lo que encontramos cuando entramos a la Asamblea Legislativa es calma y tranquilidad. Aquí es un submundo. Doña Marta, consulte a quien usted quiera, pero ni siquiera tenga la desfachatez de salir diciendo que va a consultar a Mideplán lo que diga la Contraloría. Ustedes saben que lo que corresponde es devolver el dinero”, reclamó Castro.
Por su parte, la jefa de fracción del Frente Amplio (FA), Sofía Guillén, calificó como vergonzosa la actitud de Esquivel y cuestionó al presidente de la República, Rodrigo Chaves, y a la jefa de la bancada oficialista, la diputada Pilar Cisneros.
“No solo es una de las jerarcas con más casos de investigación, no solo la Contraloría la denunció por supuestamente maquillar un estudio actuarial, mientras se le fugan especialistas, el hospital de Cartago no avanza y el de Limón tampoco. No, no, ahora, además, está ganando más plata de lo que dice la ley. Le pregunto al presidente de la República, su presidenta ejecutiva no quiere devolver la plata, ¿la va a destituir?”, declaró la legisladora.
También, se refirió a este caso la diputada de Liberación Nacional (PLN), Monserrat Ruiz, quien recordó que en otros gobiernos también hubo casos de sobresueldos.
“Renuncie Marta Esquivel, da pena. Usted, como lo dijo mi compañera Paulina Ramírez, le hace mal a la Caja. Y devuelva la plata, porque los exministros (de la administración Solís Rivera) que recibieron sobresueldos ilegales pidieron préstamos para poderlos pagar. Así que la invito a que se acerque al sistema bancario para que pida un préstamo y pueda pagar los ¢22 millones. Demuestre que tiene ética”, dijo la verdiblanca.
El frenteamplista Jonathan Acuña criticó que, luego de que la Contraloría advirtiera sobre los sobresueldos, la reacción de Esquivel fuera “ponerse en contra” de los miembros de la Junta Directiva de la Caja que decidieron ajustarle el salario.
Esquivel anunció este jueves la presentación de una recusación contra tres directivos, con el objetivo de apartarlos del conocimiento de este asunto. Aunque no precisó las razones de la recusación, la jerarca adelantó que la gestión se dirige contra Martha Rodríguez, representante de los trabajadores; José Loría, representante de las cooperativas; y Maritza Jiménez, representante del solidarismo.
“Ah no, doña Marta Esquivel, presidenta de la Caja a la que le pagaron de más, cada vez dice ‘no no, yo no quiero devolver eso, voy a preguntarle a Mideplán’. Doña Marta Esquivel, con todo respeto, páguele a la Caja y renuncie de una vez, porque lo que está haciendo usted es una ‘carebarrada’. Ya no hay más espacio, todo Costa Rica tiene claro que su única labor al frente de la presidencia ejecutiva de la Caja ha sido hacer daño y beneficiarse”, reclamó el frenteamplista.
La diputada del Partido Liberal Progresista (PLP), Kattia Cambronero, sostuvo que “una persona decente” devolvería el dinero que le pagaron de más. No obstante, destacó que el comportamiento de Esquivel es parte del patrón de liderazgo instaurado por el presidente Rodrigo Chaves, que rehúsa acatar la institucionalidad.
“Quien le dijo a la presidenta ejecutiva de la Caja que su salario no era el apropiado es el ente contralor de Costa Rica. No se lo está diciendo cualquiera, se lo está diciendo la institución responsable de supervisar el uso apropiado de los fondos en el país, y cuestionar ese criterio es absolutamente grave, como lo han venido haciendo con la Sala Constitucional, con la Asamblea Legislativa, con el Poder Judicial. Quieren hacer lo que les da la gana de la forma que ellos quieran”, detalló Cambronero.
Su compañero y jefe de fracción, Eliécer Feinzaig, respaldó que el comportamiento de Esquivel es “un patrón de conducta que se repite”, y lo comparó con el ministro de Hacienda, Nogui Acosta, quien “nos vino a mentir descaradamente en el plenario”, en alusión al “megacaso” de evasión fiscal que se sustentó en una denuncia anónima hecha en TikTok.
Asimismo, se unió a las críticas el diputado del FA, Ariel Robles. Señaló que la jerarca de la Caja hizo un manejo de documentos oficiales de la institución para justificar que no se construya el hospital de Cartago.
“Manipuló documentos de la Caja para justificar la no construcción de hospitales. ¿A quién se le puede ocurrir que está bien manipular un informe para no construir hospitales? Eso debería ser suficiente para que doña Marta esté lejos de la CCSS. Pero, como si fuera poco, mientras estaba manipulando eso, estaba recibiendo un salario de más, se le pagaba millón y medio de más al mes por manipular”, dijo Robles.
Por parte del oficialismo hablaron los diputados Daniel Vargas, Manuel Morales y Pilar Cisneros.
Vargas cuestionó que los congresistas de oposición tomaran la palabra por alusión para realizar el control político. Morales, por su parte, defendió la decisión de Esquivel de consultar a Mideplán al decir que busca “reconfirmar el criterio de la Contraloría”.
Cisneros reclamó al presidente legislativo, Rodrigo Arias, porque, según su criterio, permitió insultos y faltas de respeto en el plenario. No obstante, sostuvo que las supuestas palabras ofensivas no la ofenden. Arias rechazó sus reclamos.