Cinco legisladores de la Comisión de Asuntos Jurídicos de la Asamblea Legislativa sepultaron el proyecto de ley impulsado por el Gobierno que habría establecido un impuesto del 25% sobre los premios de lotería.
Este plan forma parte del acuerdo de ajuste fiscal firmado con el Fondo Monetario Internacional (FMI). En un principio, el Poder Ejecutivo había planteado que se aplicara el tributo sobre los a ¢225.000; luego, varió subió la base exenta hasta los ¢462.000. Con ello, Hacienda pretendía recaudar ingresos por unos ¢41.800 millones anuales para afrontar la crisis de las finanzas públicas.
Votaron en contra los legisladores Franggi Nicolás y Wagner Jiménez, de Liberación Nacional (PLN); Walter Muñoz, de Integraciṕon Nacional (PIN); José María Villalta, del Frente Amplio; y Mileidy Alvarado, de Restauración Nacional (PRN).
Nicolás, presidenta del foro de Jurídicos, explicó que al proyecto se le había vencido el plazo de trámite ordinario desde el 21 de octubre del 2021, por lo cual, en una sesión anterior, se evacuaron las mociones de fondo y, este martes, se procedió a votarse por el fondo.
Wálter Muñoz abogó por oponerse a un nuevo impuesto, pues, a su juicio, este podría desincentivar la compra de los juegos de la Junta de Protección Social (JPS) que, al mismo tiempo, vería disminuida sus ganancias. Estos recursos, recordó Muñoz, se usan para programas sociales.
En la misma línea, el diputado Villalta sostuvo que el proyecto carece de estudios técnicos que demuestren la nula afectación a los ingresos de la Junta y del financiamiento de los programas sociales.
“Podría, en teoría, desincentivar compra de lotería porque las personas no considerarían tan atractivo el premio. Al desincentivar el premio de de la Junta, se verían afectados los programas sociales que se financian de la venta de lotería”, machacó Villalta.
Sin embargo, el frenteamplista es de la opinión de que los premios por estos juegos deben ser gravados de forma progresiva con el impuesto de renta, por generar un incremento sorpresivo de la persona que lo gana.
“Los premios de lotería generan un incremento sorpresivo del patrimonio de la persona provocado por la suerte. Así como hay otros incrementos patrimoniales que contribuyen hoy con el impuesto de renta, es razonable pensar que, si una persona de pronto incrementa su riqueza de forma azarosa, producto de la suerte, pueda contribuir en la proporción correspondiente en ese aumento”, planteó Villalta.
Villalta cuestionó que el Gobierno haya abandonado a su suerte el proyecto. Lamentó que ni siquiera Carolina Hidalgo, diputada oficialista de la Comisión de Jurídicos, haya asistido a la sesión a defender la iniciativa.