Irene Cañas, presidenta ejecutiva del Instituto Nacional de Electricidad (ICE), alertó hace una semana al Gobierno que Jaime Palermo Quesada fue designado como su gerente general interino sin que este contara con los requisitos técnicos y de idoneidad necesarios.
Así consta en una carta, en poder de La Nación, remitida el 23 de enero al viceministro de Telecomunicaciones, Édwin Estrada.
En el documento, Cañas explica que en reiteradas ocasiones urgió a los directivos a nombrar un gerente general, pero aclaró que se opuso a la designación de Palermo Quesada. Así lo manifestó en la sesión 6307 del pasado 17 de diciembre, cuando se le nombró.
Cañas expuso que el nombramiento debía realizarse basado en “criterios técnicos, de competencia e idoneidad”, con fundamento en el artículo 16 de la Ley General de Administración Pública.
En la misma sesión, ella postuló a Catalina Vargas, quien ocupa la Gerencia de Servicios Corporativos, pues a su juicio, ella sí cumple con todos los requisitos.
Cañas, en la carta, denuncia que según el Reglamento Corporativo de Organización del ICE, es ella, como presidenta del Instituto, quien tiene la responsabilidad de postular ante el Consejo Directivo a los candidatos.
La funcionaria cita que el artículo 1, inciso 24 de ese Reglamento, indica que “proponer al Consejo Directivo, el nombramiento, suspensión y remoción de los directores corporativos, gerentes, entre otros, es una competencia de la Presidencia Ejecutiva”.
Este nombramiento sería uno de los hechos que dieron origen a la suspensión de seis directivos del Instituto, medida anunciada este martes en Consejo de Gobierno.
“Se investigará la presunta designación ilegal del gerente general donde mediante una nota se nos informa que no existían los criterios de idoneidad y técnicos y, eventualmente, puede haberse violentado el ordenamiento jurídico vigente”, expresó el martes Adrián Salazar Solís, ministro de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) en conferencia de prensa.
Además, para tomar la decisión se tomó también en cuenta otro hecho: el pago supuestamente indebido de cesantía a 36 empleados del ICE, los cuales fueron trasladados a Radiográfica Costarricense, una de las subsidiarias de la empresa. Esto no califica como despido, según la Procuraduría General de la República, por lo cual no procedía la cesantía.
Otro elemento que pesó en la decisión del Gobierno para suspender a los directivos es la decisión que tomó la Directiva del ICE de eliminar, de forma irregular, la figura de Gerencia General (creada por ley) conforme un acuerdo unánime de los directivos del pasado 20 de octubre de 2014 en la sesión 6111.
Precisamente, el nombramiento de Palermo por parte de los directivos suspendidos se dio luego de un criterio vinculante de la Procuraduría General de la República (PGR) que señaló la ausencia de fundamento legal para eliminar la Gerencia General.
Ahora, sin embargo, el Gobierno considera que esa designación habría sido ilegal.
Palermo, ingeniero industrial, con una maestría en administración de empresas, había iniciado como gerente general interino el viernes 18 de enero, con recargo a su puesto actual de gerente corporativo de Telecomunicaciones.