Alfredo Hasbum, director general del Servicio Civil, alegó este miércoles, en la Asamblea Legislativa, que crear un único régimen para todos los empleados públicos generaría un caos.
Así defendió la idea del gobierno de crear ocho regímenes dentro del proyecto de empleo público.
La mayoría de los diputados presentes se declaró inconforme con la posición del funcionario, en vista de que la Contraloría General de la República advirtió de que esa propuesta resulta insuficiente para eliminar las disparidades salariales entre puestos similares en las instituciones del Estado.
LEA MÁS: Contraloría sugiere más equidad en plan de empleo público
Hasbum fue recibido este miércoles en audiencia por los diputados de la Comisión de Gobierno que estudian este proyecto de ley, el cual pretende que los nuevos funcionarios, y los antiguos que lo deseen, reciban un salarios competitivo por sí solo, sin pluses salariales.
La Dirección General de Servicio Civil participó en la preparación del texto que prevé ocho categorías de empleo público, en las que las escalas salariales pueden variar entre una y otra. Se trata de un régimen general de servidor público y siete subregímenes diferenciados: trabajadores de la salud, policiales, de educación, del servicio exterior, de universidades públicas, del Poder Judicial y de confianza.
No obstante, la Contraloría insiste en que debería existir un solo régimen de empleo público.
Hasbum rechazó que la idea de los ocho regímenes sean un retroceso. Argumentó que hoy el régimen de Servicio Civil solo cubre a 46 instituciones y que, de ahí en adelante, las demás instituciones se rigen con sus propias reglas.
"Es importante que se tenga en cuenta que actualmente, de las 310 instituciones, solo 46 tienen las mismas reglas. Hay 265 subregímenes donde cada jerarca tiene bastante autonomía en la toma de decisiones de recursos humanos.
"El pasar de 265 subregímenes a ocho es un gran avance. Aunque se mencionan subregímenes es claro que los empleados no profesionales serían manejados bajo los mismos criterios y bajo los mismos esquemas salariales.
“Resulta complejo uniformar todo el personal”, explicó Hasbum ante los diputados.
En su declaración ante los diputados, el funcionario dijo que crear un solo régimen “generaría un caos absoluto”.
Adicionalmente, Hasbum dijo que la premisa del proyecto es la búsqueda de la eficiencia y no un objetivo fiscalista, es decir, de equilibrio en las finanzas públicas.
El plan pretende, según dijo el funcionario, complementar las medidas de ahorro en salarios que ya se adoptaron con la reforma fiscal.
Sin embargo, resaltó que la adopción del salario global tendrá un impacto positivo en las finanzas públicas.
Además, adujo que el plan atiende las recomendaciones de la Organización para el Desarrollo y Cooperación Económicos (OCDE) y de convenios de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en los que el país se comprometió, por ejemplo, a mejorar el balance vida-trabajo.
Diputados inconformes
Los diputados manifestaron dudas con respecto a la propuesta.
El diputado Erwen Masís, del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), adelantó que presentará mejoras al proyecto de ley porque, en su criterio, no es visionario en cuanto a las nuevas modalidades de trabajo.
Jonathan Prendas, diputado de Nueva República, le dijo a Hasbum sentirse alarmado del aval que da esa Dirección al proyecto, dadas las observaciones de la Contraloría.
A su comentario, Hasbum respondió que, en la elaboración de la propuesta, trabajó el personal más calificado del Servicio Civil, mientras que la CGR no puede tener expertos en todo.
Participaron de esta sesión los diputados David Gourzong, Luis Fernando Chacón y Jorge Fonseca, de Liberación Nacional; Aracelly Salas y Erwen Masís, de la Unidad; Nielsen Pérez, de Acción Ciudadana; y Jonathan Prendas.