Limón .- El jefe de la DIS, Mariano Figueres, exigió ayer a Japdeva y a la Dirección de Aduanas que pongan a trabajar dos equipos de escaneo de contenedores donados por China en el 2009 y que a la fecha siguen sin operar.
Los escáneres, con un valor de $6 millones, tienen cinco años de estar en los predios de la dirección de Aduanas y los puertos de Moín y Limón, en esta provincia.
El jefe de la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS) llegó ayer, junto con el viceministro de Ingresos de Hacienda, Fernando Rodríguez, a las instalaciones de Japdeva, para apurar los acuerdos necesarios, con el fin de que se pongan a operar los citados aparatos.
Los escáneres fueron pagados con fondos del convenio de cooperación técnica y financiera entre Costa Rica y China, firmado entre ambos países en noviembre del 2008. Sin embargo, a la fecha, no hay técnico de Hacienda que sepa leer las imágenes que procesan.
Fueron fabricados por la firma china Nuctech Company Limited, y permitirían detectar si los contenedores que ingresan o salen del país llevan contrabando o sustancias ilegales.
Su mantenimiento le cuesta al país $423.000 al año, que incluye el tener a un técnico de la firma Nuctech destacado en Limón para estar pendiente de que no se dañen, aunque no se usen. El técnico se llama Bijiang Shu, y ni siquiera habla español, aunque tiene tres años de vivir aquí.
Molestia. Figueres recorrió ayer, junto a una docena de funcionarios de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente Atlántica (Japdeva), de Hacienda y Aduanas los patios de los puertos para determinar en qué lugar se pueden ubicar los escáneres.
“Es parte de nuestras obligaciones y de los esfuerzos que realizamos para mejorar la gobernabilidad y calidad de Gobierno”, señaló Figueres, quien se mostró molesto, en vista de que para operar los aparatos solo se requiere de un piso de concreto, conexión eléctrica e Internet.
A pesar de que solo necesita condiciones mínimas, la falta de coordinación entre las instituciones estatales ha impedido que se pongan a trabajar. Figueres insiste en que su puesta en uso es necesaria para cumplir con acuerdos internacionales de exportación con EE. UU. y países europeos.
“Hay un tema de cuidar la integridad de las exportaciones, que el sector exportador tenga tranquilidad en el sentido de que no se siga desarrollando un mal nombre en el extranjero por algunas empresas en el exterior que utilizan toda la estructura exportadora para otras fines”, dijo.
El viceministro Rodríguez dijo que sentía vergüenza por la incapacidad del Estado para poner a trabajar los equipos.
“Todos estamos comprometidos y empezamos a sentir no solo la presión, sino la vergüenza de que esto no haya caminado. Haber venido hoy, ver esto en persona, ver el funcionamiento y ver dónde no están y dónde deberían estar lo hace a uno comprometerse”, afirmó el viceministro de Hacienda Fernando Rodríguez.
Rodríguez dijo que esta semana firmarán un convenio con Japdeva, el Ministerio de Obras Públicas y Transportes y la Dirección de Aduanas para acelerar la puesta en operación de los aparatos chinos lo antes posible.