El embajador de Estados Unidos en Costa Rica afirma que la política migratoria de su país no tiene en agenda endurecer los requisitos de ingreso de los cubanos mediante una reforma a la Ley de Ajuste Cubano, que data de 1966. En conversación con La Nación, Fitzgerald Haney, explicó la posición de esa nación frente a la oleada de migrantes que se desató este año y de la crisis que enfrenta Costa Rica por este motivo. El siguiente es un extracto de la conversación sostenida con él este martes.
¿Cómo percibe EE. UU. este conflicto migratorio?
Hay una cosa importante de destacar desde el principio: nosotros tenemos la Ley de Ajuste Cubano, que quiere decir que si un cubano toca tierra (en EE. UU.) tiene beneficios migratorios. No hay un cambio en esa política, tendría que darse un acto del Congreso de los Estados Unidos para que eso cambie. No hay nadie que esté empujando para que eso cambie.
Sin embargo, los rumores de un eventual cambio alimentan la ansiedad de la población cubana, provocando una salida más estrepitosa vía Ecuador.
Nosotros les estamos diciendo a todos los países de la región que no ha habido cambios (en la Ley de Ajuste Cubano), se lo hemos dicho a Cuba y a los países desde Ecuador hasta México.
”Esto no es una cosa nueva y obviamente hubo un cambio en el 2014, cuando Ecuador decidió eliminar la visa para que los cubanos vayan a ese país. También hay un rumor, un chisme, de que México va a cambiar su política (migratoria con los cubanos). Nosotros hablamos con Migración de México y nos dicen que no va a haber cambios”.
Tomando en cuenta la normalización de las relaciones diplomáticas entre EE. UU. y Cuba, es insoslayable tocar el tema de las relaciones migratorias. ¿Ya han tocado este tema con el Gobierno cubano?
Consta que es un tema que llevamos años tocando con Cuba. Antes de reanudar relaciones diplomáticas ya se tocaba este tema. Es parte de una conversación mayor que tenemos.
Según datos del Gobierno de Estados Unidos, en el último año se reportó el ingreso de cerca de 24.000 cubanos a su país. ¿Se puede achacar ese número a la posición de Ecuador de no pedir visa a los cubanos?
No sabría decir exactamente, pero sí hemos visto un aumento significativo en este año. Obviamente algo cambió. La ruta de Cuba a Estados Unidos, vía Ecuador es muy larga y difícil. Obviamente juega una parte, y creo que la crisis que vemos en Costa Rica también se debe al buen trabajo de las autoridades a la hora de desarticular una banda de tráfico humano para proteger a los inmigrantes, pero eso obviamente dejó un hueco.
¿Fue contraproducente?
No, yo creo que no, se hizo lo que se tenía que hacer. Lo que nosotros estamos diciendo que se debe hacer: nadie debe traficar con personas ni con cualquier cosa. Se hizo exactamente lo que se tenía que hacer.
No obstante, no hubo un plan de contención para trasladar a las personas que viajaban con los traficantes, con los coyotes.
Eso fue lo que pasó, hay más de una banda, y al desarticular una, los otros desaparecieron. Ya tenían una operación en el sur, y eso fue lo que pasó, lo que, sumado a los chismes sobre cambios (en la política de EE. UU.), aumentó el shock (de las personas).
El Gobierno de Costa Rica hace un llamado para abrir un corredor humanitario, no para promover la disidencia cubana, sino para facilitar el viaje de los cubanos que estén en tránsito. ¿Apoya EE. UU. ese llamado?
No sé cuál va a ser la forma de resolver el problema, pero sí sabemos que es un problema regional y debe tener una solución regional. Ya sea un corredor humanitario, o mayor comunicación entre los países, no sé, pero debe tener una solución regional.
Los embajadores de EE. UU. en los distintos países donde transitan los cubanos deben estar al tanto de lo que sucede. ¿Ha habido coordinación de las autoridades de su país?
Sí, es algo que nos preocupa y hemos estado hablando mucho entre nosotros. Estamos en contacto con todos los embajadores de la región, y hay que trabajar en conjunto con los países para solucionar el problema.
EE. UU. no se ha mantenido indiferente ante este problema, ¿pero qué tipo de apoyo va a dar frente a la situación?
Es relevante recordar que todo país tiene un deber sobre cómo tratar migrantes. Hay que dar un aplauso a Costa Rica porque han tratado de cuidar a los migrantes. Nosotros también estamos buscando cómo ayudar, ya tenemos fondos de la Organización Internacional para las Migraciones, que va a dar apoyo a Costa Rica. Estamos tratando de ayudar.
La Embajada de EE. UU. aplaude la acción; sin embargo, ¿cómo ve el Gobierno de su país este paso de cubanos en medio de una campaña preelectoral?
Bueno, no ha cambiado nada. No hay por qué pensar que nosotros estamos pensando diferente. La Ley de Ajuste Cubano tiene más de 50 años de vigencia, no vemos por qué debería cambiar.
Empero, los cubanos temen que cambie. Las relaciones diplomáticas entre EE. UU. y Cuba estuvieron rotas por más de 50 años, ¿qué garantía hay para que no cambie la Ley de Ajuste?
Lo que dije, y lo repito, tendría que ser un acto del Congreso y no hay alguien que esté empujando ese cambio. Nosotros no lo vemos en un horizonte cercano.