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Usted dice que Presidencia participó en la “socialización” del proyecto. ¿En qué consistió esa participación?
Es cierto, lo dije. Cuando se haga la investigación del Micitt, verá que sale también el trabajo coordinado que se hizo con el Ministerio de la Presidencia, para ver cómo se iban a hacer los talleres de consulta de la ley y cómo se iba a divulgar. Fue un trabajo muy de coordinación.
¿Conocía Presidencia la naturaleza del texto?
No sabría decir, no sé hasta qué punto sabían del contenido del proyecto de ley.
¿Quién lideraba esa investigación de cómo fue la elaboración del documento?
La lideré yo, pero la investigación sigue en pie y seguro van a sacar un informe completo para entregárselo a don Luis Guillermo Solís.
¿Qué se supone que debería incluir el informe, al menos hasta donde usted tenía conocimiento?
Va a consistir en un detalle de todo lo actuado desde el inicio del proceso de elaboración de ley, incluidas fechas, participantes, correos enviados y reuniones celebradas.
¿Cuándo se empieza a deteriorar la relación con Ruiz?
Desde el tiempo cuando se habló de cobrar por contenido las descargas de datos en Internet móvil, justo por la falta de comunicación que no teníamos, en donde se me daban consejos sin información clara de las repercusiones.
¿Y fue una separación franca en el transcurso del tiempo?
Ambas partes intentamos mejorar la comunicación y relación de trabajo, pero esto fue muy difícil.
¿Qué opina del señalamiento del presidente Solís sobre su mal manejo político de este tema del proyecto de ley?
No entiendo claramente a qué se habrá referido. Yo asumí el costo político de este asunto como jerarca de la cartera y siempre he dado la cara.
¿Ha conversado con él?
No, él no me ha llamado ni tampoco yo a él.