Paola Mora, expresidenta y actual integrante de la Junta Directiva del BCR, acusó la noche de este martes a su compañero, Alberto Raven Odio, de mentir ante los diputados que investigan los créditos que el Banco de Costa Rica (BCR) otorgó para importar cemento chino y para la compra de una planta hidroeléctrica.
Bajo juramento, ante una consulta de Ottón Solís, el director Raven aseguró que él nunca se referió al préstamo de $20 millones otorgado a la importadora Sinocem Costa Rica, "porque creí que tenía un conflicto de intereses", en vista de que hasta hace unos meses él era el fiscal de la cementera Holcim, que compite con el cliente del banco.
A la vez, el abogado entregó una certificación de la Secretaría de Actas de la Junta Directiva del Banco.
Dijo que, únicamente en la sesión del 26 de abril del 2017, el intervino para decir, primero, que “se inhibe de participar del análisis y discusión de ese tema…, por haber ocupado, hasta hace unos días, el puesto de Fiscal en una compañía que es competencia de la Sinocem Costa Rica S. A., dentro de la industria del cemento”. Y, segundo, “que, en este y en cualquier caso, al Banco le corresponde velar porque el crédito no tenga problemas y se mantengan las garantías”.
La actual presidenta del BCR, Mónica Segnini, respaldó al director nombrado en el primer año de la administración de Laura Chinchilla. Afirmó que él siempre se inhibió.
No obstante, Paola Mora dijo tener constancia de que existía una primera y una segunda versión del acta sobre lo que él dijo ese día.
Ella dejó copia de un correo remitido el 30 de junio anterior por Pablo Villegas Fonseca, secretario de Actas del BCR, en el que confirma que existió una primera versión de lo que dijo Raven, diferente a la última, que fue la que él leyó ante los diputados.
En la primera versión del acta de esa sesión, el director dice: "El director Lic. Alberto Raven Odio dice que al BCR no le corresponde velar por el comportamiento del mercado de un producto, ni tampoco preocuparse si existe una lucha comercial entre los competidores. Indica que el BCR tiene un crédito aprobado a la empresa Sinocem Costa Rica S. A. y por eso considera que al banco solo le corresponde velar porque ese crédito no tenga problemas y lograr la recuperación de fondos, y asegurarse que no se pierda el contrato con la empresa aseguradora, y que se mantenga la garantía que respalda el crédito. Indica que el Comité de Crédito del BCR aprobó el crédito a esa empresa, pero comenta que, en lo personal, nunca hubiera aprobado el financiamiento a una empresa que no tenía experiencia en el ámbito comercial, y se desconocía si tenía la capacidad para la manipulación y la colocación del producto en el mercado costarricense".
Y la directora Mora dijo que, para modificar lo dicho en una sesión, era necesario el acuerdo de todos los directores.
Paola Mora también entregó a los diputados un documento en el que afirma que Raven no figuró en actas más que en una ocasión de manera formal (acta 16-17), "pese a que sí participaba opinando en varias ocasiones, con comentarios sobre el tema y no se inhibía formalmente en la mayoría de las sesiones tal y como constan en las actas, conociendo para todos los efectos información sensible de un cliente que a su vez era competidor directo de la empresa de la cual hasta hace unos meses él era su Fiscal".
Añadió que eso le provocó disgustos con Raven. Consultada por el diputado Julio Rojas afirmó: "El ataque (de Raven) fue directo, fue claro, también presionó al gerente general, Mario Barrenechea, para que saliera a dar declaraciones positivas sobre el caso de Coopelesca, eso me consta. Y consta en actas las veces que se participó, cuántas veces se inhibió y cuántas veces no se inhibió de acuerdo a las propias actas. Nunca se inhibió y, en el caso de Sinocem, hasta opinaba negativamente".
El caso de Coopelesca tiene que ver con un crédito de $32,7 millones que el BCR le otorgó a la Cooperativa de Electrificación Rural de San Carlos (Coopelesca) para que le comprara una planta hidroeléctrica a Holcim que, en los libros de esta empresa, estaba valorada en $12 millones.
La operación se produjo mientras Raven era director del BCR y fiscal de Holcim y la transacción se hizo en el bufete Zurcher, Odio y Raven, del cual el director bancario es socio
Este medio consultó su versión a Barrenechea, pero este se abstuvo de opinar.
Ante los diputados, la mayoría de la Junta Directiva afirmó que perdió la confianza en Paola Mora, y había preparado una moción para pedir su destitución, del cargo de presidenta, por haberse reunido con Juan Carlos Bolaños, importador de cemento, a espaldas de los demás y por decir que no lo conocía.
La presidenta Mónica Segnini dijo sobre Paola Mora: "Ella nos dijo a miembros de la Junta Directiva que podríamos ir a la Fiscalía porque al cliente se le había tratado mal cuando lo que hemos hecho los directos es externar preocupaciones".
Paola Mora contestó: "Eso se refiere a la sesión en la que Alberto Raven presenta el audio a la Junta Directiva. Él pretendía ese día, abiertamente, que la Junta tomara un acuerdo drástico, inclusive don Francisco Molina (también director) y doña Mónica Segnini, en el audio, que ahora ella restringe los audios, porque es parte de la estrategia de ella, para que no se conozca la verdad, ella lo que hace es decir que no la hace falta más que la palabra de don Alberto para estar totalmente clara del audio. Y, en el caso de don Francisco Molina, pide que se suspendan los giros de Sinocem sin estar el audio judicializado, ninguno de ellos al día de hoy ha presentado una denuncia penal contra Juan Carlos Bolaños por ese audio, sin embargo sí lo mediatizaron".
El audio al que se refiere es una supuesta conversación entre Juan Carlos Bolaños y el funcionario del BCR, Guillermo Quesada, en la que, a juicio de Raven, hablan de un supuesto plan para que Sinocem no tenga que pagar el crédito.
El diputado Julio Rojas, entonces, le preguntó a Paola Mora: "¿Usted puede comprobar con los documentos que trae que don Alberto Raven no se inhibió?".
"Sí señor, ahí está, de acuerdo a las propias actas de Junta Directiva y hay un correo que demuestra que la misma certificación que le hizo el secretario de actas no es cierta".
"¿Don Alberto Raven miente entonces?", le dijo el legislador.
"Sí señor, ha mentido. Aquí tengo un documento que quiero dejar también donde consta que el bufete Odio y Raven, a cargo de don Claudio Donato, ha levantado actas notariales sobre respecto al cliente Sinocem".
Alberto Raven replicó: "Yo quiero dejar constando que yo nunca me he referido al crédito y puedo aportar todas las actas para que ustedes revisen mis participaciones en las actas. Yo me he inhibido de participar, me he inhibido de comentar sobre el crédito y con gusto le presento todas las actas".
Él añadió que tampoco votó la moción en la que se acordó solicitar una investigación externa del crédito de Sinocem, debido su condición de exfiscal de Holcim.
Nota del editor: Esta noticia fue actualizada a las 10:20 a. m.