Lejos de considerar la derrota sufrida por Costa Rica ante Venezuela en la ONU como un golpe a la imagen internacional de nuestro país, los expresidentes Laura Chinchilla y Miguel Ángel Rodríguez destacan el hecho de que en tan solo 15 días se haya logrado obtener el voto de 96 naciones.
El régimen de Nicolás Maduro se dejó el asiento en el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, con solo nueve votos más: 105 contra 96.
Ese resultado, según los exmandatarios, es meritorio para Costa Rica, pues la campaña venezolana se fraguó durante años y la de Costa Rica, en dos semanas.
“Venezuela llega, pero llega en una situación vergonzosa, en donde se demostró una vez más que quienes están dotados de autoridad ética y moral en el mundo para hablar de derechos humanos nunca estuvieron con Venezuela”, afirmó la expresidenta del periodo 2010 - 2014.
Ambos exgobernantes dijeron sentirse tristes por la llegada del régimen chavista al máximo foro internacional sobre derechos humanos, pero atribuyen ese desenlace a prácticas burocráticas y deficientes en el seno de Naciones Unidas, así como a pactos que logró sellar Venezuela con otros países.
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“En este momento, los países petroleros se apoyan entre sí, y ahí está Venezuela. Se apoyan entre sí también los países que pueden ser acusados de violaciones de derechos humanos, se apoyan entre sí países que tienen tendencias ideológicas similares a las de Venezuela”, afirmó Rodríguez.
“Además, los países negocian votos, yo voto por usted para esto y usted vota por mí para esto otro. Venezuela tiene tres años de estar trabajando en esa candidatura, Costa Rica trabajó por 15 días, ¿y perdió por diez votos? Obtuvo en 15 días casi tantos votos como Venezuela contra tres años de trabajo”, añadió el expresidente (1998-2002).
Afirmaron que los exmandatarios de la República apoyaron la candidatura de Costa Rica a sabiendas de la dificultad que representaba conseguir los votos necesarios para ganar el asiento en el Consejo.
Chinchilla señaló que en órganos como la ONU, predominan criterios burocráticos sobre los países a los que les corresponde ocupar puestos cada cierto tiempo, por lo que opina que los criterios éticos quedaron de lado.
“El objetivo no era ganar un puesto por ganarlo, el objetivo había sido precisamente levantar la voz por lo que considerábamos una aberración. La aberración se concretó, pero es más bien producto de una deficiencia del sistema internacional y no necesariamente producto de un faltante ético de nuestro país”, dijo Chinchilla.
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“Nos atrevimos a hacerlo con todos los riesgos que esto suponía y vaya, una campaña de 15 días comparada con lo que Venezuela debió haber invertido en muchos de esos votos, me parece que no nos deja tan mal como a una gente le podría preocupar”, manifestó Chinchilla.
Rodríguez se inclina por pensar que la imagen internacional del país sale fortalecida.
“Creo que los países valoraron la valentía del país que propuso una candidatura 15 días antes de la elección”, afirmó.
Chinchilla, aunque no ve necesariamente una ganancia, tampoco considera que hay una pérdida.
“Me parece que ante quienes verdaderamente cuentan, que son las organizaciones de derechos humanos, todas cerraron su respaldo alrededor de Costa Rica. La gente que es consciente de lo que esto supone, me parece que simplemente comprendió la lucha que dimos”, dijo.
Los dos fueron severos con el pronunciamiento que emitieron los garantes éticos del presidente Carlos Alvarado, quienes criticaron la cercanía que la Cancillería dijo buscar con Brasil, en la búsqueda del asiento de la ONU.
Rodríguez lo calificó de “inconveniente” y Chinchilla de “vergonzoso”, pues consideran que quitaron fuerza a la candidatura a lo interno del país.
La exgobernante afirmó que los garantes “vieron fantasmas donde no los habían”, y Rodríguez señaló que a Costa Rica le convenía mantener una buena relación con Brasil y su diplomacia robusta.
Según describe la misma página de Naciones Unidas, “el Consejo de Derechos Humanos es un organismo intergubernamental dentro del sistema de las Naciones Unidas compuesto por 47 Estados responsables de la promoción y protección de todos los derechos humanos en todo el mundo”.