En las elecciones nacionales del 2022, Costa Rica tuvo la cifra récord de 25 candidatos presidenciales. Sin embargo, menos de un año después, siete de ellos ya se desligaron de los partidos políticos que los colocaron en las papeletas, mientras que otros cuatro se mantienen al margen, inactivos, aunque no han salido del todo.
Para Rónald Alfaro, investigador del Centro de Investigaciones y Estudios Políticos de la UCR (CIEP), esto demuestra un problema de la institucionalidad partidaria en el país: los partidos se convierten en “estructuras de vapor, fugaces como las bengalas”.
“Es un mal que afecta a los liderazgos y a los partidos. Tenemos que pensar en límites razonables para el nacimiento y desaparición de partidos, comentó. El fenómeno impulsa la aparición de grupos con poco experiencia que, luego de los comicios, desaparecen.
Los que se separaron
El periodista Greivin Moya incursionó en la política con una candidatura presidencial con Fuerza Nacional. Luego de no resultar electo ni para presidente ni diputado y exhausto del proceso electoral, Moya se retiró del partido y vive tranquilo sus primeros meses de jubilado, entre la escritura y una colaboración que brinda a la Municipalidad de Quepos.
El excandidato presidencial, Rolando Araya, reconoció que su paso por Costa Rica Justa fue un asunto de “temporada”. Él también llevaba doble postulación y no logró llegar al Congreso.
Rodolfo Piza, quien se postuló por tercera ocasión, se alejó de Nuestro Pueblo, una agrupación que se transformó a escala nacional en las elecciones presidenciales anteriores para llevar su nombre.
También tuvieron un paso fugaz el cirujano plástico, Christian Rivera, quien usó como plataforma al partido Alianza Democrática Cristiana, del alcalde de Cartago, Mario Redondo; así como Luis Alberto Cordero, excandidato del Movimiento Libertario, agrupación a la que renunció tres meses después de las elecciones al cargo de presidente suplente.
Óscar Campos, quien recién había fundado Encuentro Nacional para participar en los comicios, dimitió a la agrupación antes de la segunda ronda, para asumir un puesto de directivo del Instituto Fomento Cooperativo (Infocoop).
Pese a que Eduardo Cruickshank fue diputado y candidato por Restauración Nacional, actualmente está desvinculado de la agrupación y en un “stand by” de su carrera política.
Los anteriores son los siete excandidatos que se separaron del todo de los partidos.
Luego, Federico Malavassi, de Unión Liberal, y Rodolfo Hernández, del Republicano Social Cristiano, tienen algún acercamiento tímido a las agrupaciones, pero reconocen que no tienen ningún rol activo en ellas.
Óscar López, presidente del Partido Accesibilidad Sin Exclusión, se mantiene en esas filas, pero en estado inactivo para defenderse de un juicio en su contra por presuntas faltas electorales; mientras que Maricela Mora, también sigue en la presidencia de la Unión Costarricense Democrática que está actualmente en un impasse a la espera de las próximas elecciones presidenciales.
Entre las medidas que el Congreso podría tomar, dijo el investigador del CIEP, está ordenar la desaparición de un partido si no alcanza un porcentaje mínimo de votos. Agregó que se podría aumentar el número de adhesiones para formar un partido, o bien, exigir una estructura territorial más desarrollada. “Hay que fortalecer la institucionalidad partidaria; es mejor para la democracia que existan los partidos políticos”, adujo.
Renunciaron por obligación
La ministra de la Presidencia, Natalia Díaz, tuvo que renunciar a Unidos Podemos por el cargo en que se desempeña que le impide la militancia partidaria.
Ese es el mismo caso del presidente de la República, Rodrigo Chaves, que compitió y ganó con Progreso Social Democrático (PPSD).
Siguen
Por el contrario, otro grupo de candidatos sí se mantiene en las filas partidarias que representaron en las pasadas elecciones presidenciales, con la particularidad de que son los que políticos que se han mantenido fielmente en esas filas en los últimos años.
Esos son los casos, por ejemplo, de Lineth Saborío, del Partido Unidad Social Cristiana; y de José María Figueres, del Partido Liberación Nacional.
También están los políticos que lideran las agrupaciones que representan como Wálter Muñoz, de Integración Nacional; Eliécer Feinzaig, del Liberal Progresista; Fabricio Alvarado, de Nueva República; y John Vega, del Partido de los Trabajadores. Un caso similar es el de Sergio Mena, de Nueva Generación, donde participa como fundador y secretario general suplente.
José María Villalta, del Frente Amplio; y Welmer Ramos, del Partido Acción Ciudadana (PAC), mantienen participación en las comisiones políticas de las agrupaciones, según sus representantes.
Asimismo, se mantienen activos en sus partidos Roulan Jiménez, del Movimiento Social Demócrata Costarricense; y Martín Chinchilla, de Pueblo Unido, agrupaciones que analizan la posibilidad de participar en las elecciones municipales 2024.
No fue posible conocer la actividad que mantiene la excandidata de Justicia Social, Carmen Quesada, aunque, según el Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), se mantiene como presidenta de la agrupación.
Uno a uno
Christian Rivera. Continúa siendo cirujano plástico y no tiene vínculos con Alianza Demócrata Cristiana.
Eduardo Cruickshank. Dijo adiós a Restauración Nacional y entró en un stand by de su carrera política. Labora en su propio bufete de abogados.
Greivin Moya. Periodista recién jubilado. Exhausto del proceso electoral anterior, no tiene aspiraciones políticas en el corto plazo. Trabaja como voluntario en la Municipalidad de Quepos. No tiene vínculos con Fuerza Nacional.
Luis Alberto Cordero Arias. Tres meses después de la elección, renunció como presidente suplente del Movimiento Libertario, al igual que la mayoría del Comité Ejecutivo.
Oscar Campos. Renunció a la presidencia de Encuentro Nacional, un mes después de las elecciones presidenciales. Actualmente es directivo de Infocoop. Sigue en la actividad agrícola.
Rodolfo Piza. No está en política, ni tiene ningún tipo de relación con el Partido Nuestro Pueblo.
Rolando Araya. No tiene relación con Costa Rica Justa. Afirmó que la agrupación fue “una cosa de temporada” para ir a la campaña.
Carmen Quesada. Se mantiene como presidenta de Justicia Social.
Eliécer Feinzaig. Fue electo como diputado y es el presidente del Partido Liberal Progresista.
Fabricio Alvarado. Fue electo diputado y sigue siendo el máximo líder de Nueva República.
Federico Malavassi. Abogado y profesor. Tiene un acercamiento tímido con el Partido Unión Liberal, pero está a la espera que el partido “despierte”. No descarta separarse.
John Vega. Continúa presidiendo el Partido de los Trabajadores. Es activo en la política.
José María Figueres. Pese a que dejó dudas entre los militantes sobre la idoneidad de su candidatura en las pasadas elecciones, sigue siendo parte del Partido Liberación Nacional.
José María Villalta. Es parte de la comisión política del Frente Amplio. Mantiene un vínculo estrecho con la fracción.
Lineth Saborío. Es asambleísta general del Partido Unidad Social Cristiana.
Maricela Morales. Se mantiene como presidenta del Partido Unión Costarricense Democrática, agrupación que está en un “impasse” en este momento. Impulsa un movimiento de jubilados para eliminar la contribución especial de las pensiones de lujo.
Martín Chinchilla. Trabaja como periodista en Undeca. Se encuentra activo dentro del Partido Pueblo Unido, que aspira a postular candidatos para las elecciones municipales.
Natalia Díaz. Se desempeña como ministra de la Presidencia, por lo que debió renunciar como presidenta de Unidos Podemos.
Oscar López. Concentrado en procesos judiciales en su contra, aún sigue siendo presidente del Partido Accesibilidad Sin Exclusión, que está en inactividad.
Rodolfo Hernández. Continúa siendo miembro del Partido Republicano Social Cristiano, pero está inactivo en la política después de la campaña electoral.
Rodrigo Chaves. Presidente de la República. Otro partido distinto del Progreso Social Democrático, que lo llevó a la Presidencia, se autoproclama el partido “rodriguista”.
Roulan Jiménez. Mantiene interés en ser presidente de la República con el Partido Movimiento Social Demócrata Costarricense, agrupación que preside actualmente.
Sergio Mena. Es fundador y secretario general suplente del Partido Nueva Generación.
Walter Muñoz. Presidente del Partido Integración Nacional (PIN) que está en proceso de renovación de estructuras. Ejerce como médico en el Hospital Calderón.
Welmer Ramos. Posterior a la elección se distanció del Partido Acción Ciudadana (PAC), pero luego retomó su participación en la comisión política.