El Gobierno está contra el tiempo para conseguir los $1.000 millones (¢627.000 millones) que el país debe devolver, el próximo 26 de enero, a los acreedores que invirtieron en eurobonos emitidos años atrás para financiar el gasto público.
La administración planeaba cubrir el pago con una nueva colocación de eurobonos por $6.000 millones, que permita obtener tasas de interés más bajas que en el mercado interno, pero la Asamblea Legislativa todavía no ha autorizado el endeudamiento internacional.
Nogui Acosta, ministro de Hacienda, consideró muy difícil que el Gobierno pueda salir al mercado internacional en lo que resta del año. Explicó que el proceso de preparación demanda de seis a ocho semanas.
“Vemos difícil poder salir este año. El proceso de contratación de los diferentes participantes en el proceso nos llevaría mes y medio. Significa que saldríamos después del cierre de las ventanas de inversión que se produce antes del receso del fin de año.
“El mercado vuelve abrir en enero. Queremos saber qué posibilidades hay de tener eurobonos como un mecanismo de financiamiento y, también, como una señal al mercado que nos pueda mejorar calificación en el futuro cercano y la gestión de la deuda”, dijo el jerarca hacendario.
Los títulos se registran en Luxemburgo, pero la venta se hace en todos los mercados importantes, como Nueva York, Londres, Tokyio y Los Ángeles.
Si la aprobación de eurobonos no llega a tiempo, el Ministerio de Hacienda tendrá que pagar mayores tasas de interés, en el mercado local, para conseguir los recursos necesarios para pagar el vencimiento de deuda. Esa es la “consecuencia”, insistió Acosta.
La semana pasada, cinco diputados de la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Legislativa dictaminaron positivamente una autorización para que el Gobierno se endeude por $6.000 millones en cuatro tractos anuales de $1.500 millones cada uno, siempre que cumpla las metas de equilibrio fiscal acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
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Sin embargo, se opusieron las bancadas del Liberación Nacional (PLN) y Frente Amplio (FA), lo que prevé una dura búsqueda de votos en el plenario, para aprobar el endeudamiento, porque se requiere de 38 votos.
El PLN se inclinaba por aprobar solo $1.500 millones.
“Espero que los diputados tomen conciencia para que el país pueda hacerle frente a la deuda”, dijo el ministro.