El Gobierno advirtió a los diputados de su oposición al proyecto de ley para desenganchar los aumentos salariales de los médicos de las alzas aplicadas a los sueldos de los funcionarios no profesionales.
Incluso, el ministro de la Presidencia, Sergio Alfaro, adujo que, de insistir los legisladores en eliminar el artículo 12 de la Ley de Incentivos a los Profesionales en Ciencias Médicas (ley 6836 de 1982), se podría crear un “caos social” en el país.
Alfaro presentó la opinión del Poder Ejecutivo ante la Comisión de Asuntos Sociales del Congreso, la cual tramita el proyecto de ley 19.168, del parlamentario Mario Redondo, que pretende derogar el artículo 12 de la Ley de Incentivos Salariales.
Ese artículo es el que establece el enganche entre los aumentos salariales de los funcionarios públicos y los de los profesionales en las ciencias médicas.
El plan de Redondo impediría que los médicos reciban alzas extraordinarias cuando conserjes y policías, por ejemplo, tienen sus aumentos ordinarios.
Alfaro alegó que ya el tema fue regulado mediante un decreto ejecutivo de enero de este año, firmado y publicado luego de varios meses de negociaciones entre el Gobierno y los sindicatos de los profesionales de la salud.
Sindicatos dicen no. A la par del Gobierno, los sindicatos médicos y legisladores del Frente Amplio y de Acción Ciudadana, consideran que, regulado el asunto por decreto, el proyecto de ley es innecesario y solo contribuiría a un clima de crispación social.
Edwin Solano, presidente de la Unión Médica Nacional, explicó que ya hubo suficiente negociación con el Gobierno y que de ponerse en riesgo el artículo que les permite un aumento que los aleje de otros empleados públicos, irían a las calles “a defender los salarios de los médicos”.
El secretario de conflictos del Sindicato de Profesionales en Ciencias Médicas de la Caja Costarricense de Seguro Social e Instituciones Afines (Siprocimeca), Mario Boschini, aseguró que el enganche se ha utilizado como una excusa política por los Gobiernos para no hacerles aumentos a las clases no profesionales.
“Para que nosotros no fuéramos un escudo del Gobierno, estuvimos de acuerdo en que se modificara el reglamento que quita el enganche con los no profesionales; eso es para quitar el posible pretexto político”, añadió.
Según Boschini, el artículo se debe mantener por si en algún momento un Gobierno hace un ajuste desmedido a los profesionales del sector público y los 17.000 doctores “tengan” que ir a la calle a exigir una diferenciación por las mayores responsabilidades de la profesión.
Mientras, el diputado Mario Redondo criticó al Gobierno por no querer derogar de una vez la norma que engancha los aumentos de médicos y no profesionales, el frenteamplista Carlos Hernández apoyó ese criterio.
“Ha imperado un pavor del Gobierno; cada vez que un sindicato les habla les da un miedo enorme y están lejos de defender los intereses de la población, porque aquí no estamos afectando los salarios de los médicos”, dijo Redondo.
Según Hernández, el decreto consensuado con los sindicatos es suficiente para impedir el enganche a la hora de hacer los incrementos salariales.