El candidato a la presidencia de la República, Carlos Alvarado, rechazó a los industriales abrir el mercado eléctrico y continuar el trámite de adhesión de Costa Rica al bloque comercial Alianza del Pacífico, dos asuntos en los cuales los empresarios desean avanzar.
Sobre el primer punto, Alvarado alegó que una de las ventajas competitivas que tiene el país es la producción de energías renovables, además de que la competitividad viene por la estabilidad de la nación.
A partir de esos elementos, el candidato prometió a los empresarios hacer un esfuerzo por reducir las tarifas eléctricas, que los industriales consideran altas.
"Podemos avanzar en materia de generación distribuida, pero hago mis choices (escogencias) de cuáles van a ser mis batallas, pero cuando yo como presidente veo un contexto que tenemos un déficit fiscal, un problema por el matrimonio igualitario, esa no va a ser el choice de mi carrera", señaló el candidato.
En cuanto a la producción de energía, Alvarado también descartó la producción a partir de gas natural por el impacto ambiental que, según cree, generará. Además, consideró que esa opción sería un 'retroceso' en materia energética.
El candidato propone la exploración de otras fuentes como biocombustibles, pero siempre de la mano de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope).
Además del tema de tarifas eléctricas, el presidente de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), Enrique Egloff, increpó al candidato Carlos Alvarado por su renuencia a negociar el ingreso al bloque comercial Alianza del Pacífico.
El candidato del Partido Acción Ciudadana (PAC) descarta la adhesión con el argumento de que esta podría tener un impacto negativo sobre el sector agropecuario costarricense, el cual cree que no está reforzado para competir con esos mercados.
El bloque está compuesto por México, Chile, Perú y Colombia. Costa Rica es observador y, desde el 10 de febrero de 2014, firmó una carta de interés para adherirse a la Alianza.
Sin embargo, el presidente Luis Guillermo Solís no dio seguimiento a esa negociación y, en 2015, alegó que el déficit fiscal no permitía invertir en el sector agropecuario para darle más competitividad.
Los empresarios están divididos en este tema: las cámaras de alimentos y agrícolas se oponen, pero otros sectores como los industriales apoyan la adhesión.
En esa fractura, Alvarado se inclina por descartar de entrada el ingreso del país a ese bloque comercial.
Egloff, en tanto, le recomendó reconsiderar su posición porque él cree que la Alianza le traerá beneficios a Costa Rica.
“¿Usted sabe que el consenso se inventó para no avanzar en nada? el consenso no existe”, le señaló.
"Consideramos que así como hay reglas que se han establecido, existen espacios de negociación. Y todos los países tienen excepciones, muchos en los mismos rubros que Costa Rica tiene", dijo el presidente de la CICR.
Luego preguntó: "¿Si existiera consenso en la Unión de Cámaras (Uccaep), consideraría la negociación, no le dije adhesión?"
Alvarado condicionó su respuesta, aduciendo que estaría de acuerdo si las cámaras que se oponen se mostraran anuentes a ese paso. "Si esas organizaciones levantan la mano y dicen 'nos parece', y dicen 'no va a afectar a nuestros agricultores'... si hay eso, eso se puede discutir, pero hoy eso no está", dijo el aspirante del PAC.