EscucharJosé Rafael Solano Muñoz, jefe de la División Comercial de Telecomunicaciones del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE), se abstuvo de responder si recibió presiones para colocar publicidad de la marca Kölbi en ciertos medios de comunicación o para contratar a la agencia de publicidad del Sinart.
“No voy a hacer ninguna apreciación subjetiva al respecto, ni una apreciación personal”, respondió Solano ante preguntas del diputado Ariel Robles, del Frente Amplio (FA). “Todo se ha hecho bajo los criterios técnicos”, agregó.
Posteriormente, Robles le preguntó que si alguna jefatura u otro departamento le había solicitado darle un “poquito más de plata” al medio digital elmundo.cr, porque el dueño de ese sitio web se quejaba mucho. El compareciente respondió: “No lo recuerdo”.
El legislador del FA le replicó: “No lo recuerda, pero no lo niega”.
Solano sí negó que hubiese recibido presiones del presidente ejecutivo del Instituto, Marco Acuña, o bien, del mandatario Rodrigo Chaves.
“No, señora. Yo con el presidente ejecutivo, por un tema de jerarquía… Yo estoy en el quinto, sexto nivel de jerarquía”, afirmó Solano ante una consulta de la congresista Pilar Cisneros, del oficialista Partido Progreso Social Democrático (PPSD).
No obstante, cuando la diputada Andrea Álvarez, del Partido Liberación Nacional (PLN), le preguntó si había recibido presiones de su superior directo, el gerente de Telecomunicaciones, Luis Diego Abarca, Solano primero dijo que no entendía a qué se refería con presiones.
De seguido, Álvarez le consultó si había recibido presiones para contratar a la agencia de publicidad del Sistema Nacional de Radio y Televisión (Sinart) y solo se limitó a decir: “Lo que tuve fue una instrucción”.
El jefe Comercial del ICE también se abstuvo de responder preguntas relacionadas con capturas de pantalla de varias conversaciones de WhatsApp que facilitó Jacqueline González Jiménez, quien fue directora de Estrategia Comercial de Kölbi.
Si bien no negó la veracidad de esos mensajes, adujo que se podrían utilizar en su contra en un proceso que se abrió en el Ministerio Público, por supuestas anomalías en la distribución de la pauta publicitaria de Kölbi. Se trata del expediente N.° 23-000057-0053-PE.
“En relación de que esos mensajes pueden constituir violación a mi privacidad, en el ámbito de una conversación privada, yo voy a omitir referirme a los temas que están relacionados con dichos mensajes (...). No me voy a referir. Ellos podrían constituir una evidencia dentro de un proceso penal”, afirmó el funcionario.
Por ejemplo, se abstuvo de declarar sobre un mensaje que él le envió a Solano a finales del año pasado, el cual decía: “Esto me preocupa demasiado, si requiere mi firma no la voy a dar, estoy en la misma línea que vos y lo peor es que van a seguir; hoy es esto, luego nos obligan a contratar el Sinart (Sistema Nacional de Radio y Televisión) y luego con esos medios afines al gobierno. Una porquería. Esto no termina hoy”.
Tampoco, respondió cuando la diputada Andrea Álvarez le preguntó a qué se refería cuando escribió sobre el gerente Luis Diego Abarca en relación con la contratación del Sinart: “Vea que ni él presionó hasta hoy cuando le cayeron anoche a los presidentes ejecutivos”.
El funcionario compareció, la noche de este lunes, en la comisión especial de la Asamblea Legislativa que investiga las contrataciones del Sinart y la contratación del productor audiovisual Christian Bulgarelli como consultor de Casa Presidencial con fondos del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
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Datos confidenciales
José Rafael Solano Muñoz no aportó información sobre la forma cómo el ICE distribuye su presupuesto de publicidad. Argumentó que esa información es confidencial. También negó que esa información se pudiera encontrar en el Sistema Integrado de Compras Públicas (Sicop).
De esa forma, refutó lo dicho por la diputada Cisneros, quien hace 15 días, en ese mismo foro legislativo, mencionó una serie de datos de pauta colocada por el ICE en diferentes de medios de comunicación.
Ella primero dijo que eran datos públicos. Ante cuestionamientos de otros diputados, afirmó que los obtuvo del Sicop y, posteriormente, afirmó que existían varias herramientas de medición donde se podían obtener esos datos.
