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El superintendente de Pensiones, Álvaro Ramos, aseguró sentirse frustrado porque, en su criterio, los diputados confunden conceptos elementales al discutir asuntos técnicos sobre el Régimen Obligatorio de Pensiones (ROP).
Así lo afirmó luego de comparecer ante la Comisión de Asuntos Hacendarios para referirse al proyecto de ley que permitiría a los trabajadores retirar en un solo tracto el dinero de la pensión complementaria (expediente 21.309) al cumplir la edad de retiro, plan que Ramos objeta por considerar que desprotegería a las personas durante la vejez.
Durante la comparecencia, varios diputados de la Comisión de Hacendarios hicieron mofa sobre la fórmula usada por la Superintendencia de Pensiones (Supén) para calcular la probabilidad de vida de los trabajadores y, con base en esta, entregarles su pensión complementaria.
Los diputados Eduardo Cruickshank y Otto Roberto Vargas, de los partidos Restauración Nacional (PRN) y Republicano Social Cristiano (PRSC), increparon al superintendente cuando este les dijo que la edad máxima para el cálculo de la pensión es de 115 años.
El dato surge de una tabla de proyección de vida elaborada por el Centro Centroamericano de Población (CCP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), la cual llega a los 115 años por asuntos técnicos de probabilidad.
Los legisladores criticaron que, para calcular el monto mensual de una pensión, se estime que una persona pueda vivir hasta esa edad.
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Sin embargo, según el jerarca de la Supén, el cálculo no estima que todas las personas vayan a vivir 115 años, sino que asume la probabilidad de que una parte supere los 100 años.
"El problema básico para mí es que parece haber una confusión fundamental con lo que es la expectativa de vida. Que su expectativa de vida al nacer sea de 82 años no significa que usted, a esa edad, va a caer muerto.
"A la hora de construir un retiro de fondo de pensión, yo tengo que decir ‘usted tiene una expectativa de vida que puede excederla o morirse antes, no estamos seguros de que va a llegar a los 82 años o no’.
“Entonces, para mí es un poco frustrante la confusión que hay, porque simplemente estoy asignando probabilidades para todas las edades, para ponderar y sacar expectativa de vida para todos”, expresó Ramos.
Según explicó el jerarca a este medio, una cosa es la tabla del CCP y otra cosa distinta es la esperanza de vida, que en Costa Rica es de 82 años.
“¿Por qué es tan importante tener la tabla hasta tan tarde? Porque si usted tiene 30 años, su probabilidad de llegar a los 100 es muy pequeña, pero cuál es la probabilidad de una persona de 95 años de llegar a 100 o a 105 años? De repente, bastante alta, y la calculo con una tabla de vida de hasta 115 años”, explicó.
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La discusión por el proyecto
Eduardo Cruickshank, impulsor del proyecto, cuestionó a la Supén por la forma en la que la ley permite a unos llevarse el ROP en un solo tracto y a otros no. Para el restauracionista, la gente de menos ingresos es catalogada como “ciudadanos de segunda categoría”.
Actualmente, el sistema permite retirar la totalidad del ROP si la pensión complementaria no supera el 10% de su jubilación básica. Esto le puede ocurrir principalmente a las personas que cotizaron pocos años para el régimen complementario, el cual fue creado en el 2001.
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Así, por ejemplo, si una personas obtiene una pensión del IVM de ¢500.000 mensuales y la del ROP sería de ¢40.000, se le permite llevarse los ¢8 millones acumulados o recibir el pago mes a mes.
En cambio, si la pensión del IVM es de ¢500.000 y la del ROP es de ¢100.000, se le pagará mensualmente.
Para hacer el cálculo, la Supén divide el dinero de cada persona en la pensión complementaria entre 100.
Álvaro Ramos insistió en que el Régimen Obligatorio de Pensiones (ROP) no es un ahorro, sino una pensión adicional a la básica.
Esta última, para la mayoría de los trabajadores, corresponde a la del régimen de Invalidez Vejez y Muerte (IVM) de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), aunque también puede ser del Magisterio Nacional (maestros) o del Poder Judicial (funcionarios judiciales).
En vista de que el ROP es una pensión complementaria a la básica, enfatizan los expertos, este no debería entregarse en un solo desembolso, sino en tractos, como se hace actualmente, pues su finalidad es garantizar un mayor ingreso en los últimos años de vida.
"Estamos en una situación económica difícil en el país. Hay mucha incertidumbre, entonces a la gente le está costando ver a largo plazo.
“Cuando hay tanta incertidumbre económica, la gente quiere el ya, el ahora, la tabla de salvación y ‘después resuelvo el futuro’”.
Así se explica el superintendente la insistencia de los diputados de impulsar el proyecto de ley.
Sin embargo, asegura que su labor es proyectar en el largo plazo.
“Mi trabajo es tratar de pensar en el futuro largo: 20, 30, 40, 100 años. El ejemplo que pongo siempre: Una mujer de 65 años en Costa Rica espera vivir 22 años más. Yo creo que cuesta interiorizar eso y hay que entender que el dinero cuesta rendirlo por 22 años”, añadió el superintendente.
Los únicos congresistas que consultaron a Ramos sobre sostenibilidad del ROP y expectativa de vida fueron Laura Guido, del Partido Acción Ciudadana (PAC) y Wagner Jiménez, de Liberación Nacional.
